lo que yo leo

Un blog sin pretensiones, sobre reseñas literarias para leer en 10 minutos; contiene comentarios sobre libros, recomendaciones, divagaciones y toda clase de digestiones literarias que un lector compulsivo ha aderezado a su gusto. Por supuesto, abierto a colaboraciones y opiniones. Casi es obligatorio equivocarse aunque, evidentemente, yo soy yo y tú, eres tú, por supuesto; pero ni yo soy tú ni tú eres yo, por lo tanto, todo lo que escribas es tu responsabilidad: cada uno es dueño de sus palabras y de sus silencios, sin embargo, tu libertad no te permite escribir nada ilegal o degradante para otros como tú y como yo. Es por eso que, al menos ese SILENCIO sí impera en este blog.


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«propiedad y libertad», de richard pipes: tú y yo, tuyo y mío.


«Estas concepciones se convirtieron en los fundamentos de la independencia europea debido, especialmente, a que en el siglo XVII el término «propiedad» llegó a abrcar no solamente las posesiones físicas de las personas sino también la posesión de sus vidas y su libertad»  R.P.

Cuando, en el año de la conmemoración del centenario de la revolución soviética, te preguntan en una entrevista sobre los beneficios que trajo al mundo dicho acontecimiento y tu respuesta es algo así como que “no hubo nada positivo ni grandioso”, “un legado de millones de cadáveres” y “un régimen de terror sin precedentes”, tienes que tener clara tu posición y bién preparado tu argumentario para hacer frente a la avalancha de críticas filoizquierdistas y al rodillo de la intelectualidad bienpensante, políticamente correcta y adalid de una tolerancia unidireccional. Obviamente, sin contar con el abierto contraataque (dialéctico) desde posiciones políticas comunistas. Esta anecdota define claramente al personaje, recientemente fallecido, Richar Pipes. Independientemente de las connotaciones políticas de su trabajo, al parecer existe consenso en que fue un historiador riguroso, especializado en la historia rusa y en la revolución soviética y el comunismo. Su perfil político, muy, muy conservador, (fue consejero de Reagan y asesor de la CIA en época de George W. Bush), no empaña, sin embargo, su valía intelectual y la validez de su trabajo como historiador.

Este ensayo titulado “Propiedad y libertad. Dos conceptos inseparables a lo largo de la historia” hace innecesaria toda reseña acerca de su tesis principal, explicitada en su título. Al igual que esas novelas policiacas en las que su autor revela en las primera páginas quién es el asesino, Richard Pipes, sin ningún género de duda, ya nos muestra desde el inicio quien mató a quién y, casi, el por qué.

Aun cuando el concepto de libertad, no suficientemente entendido -ni explicado-, ha variado a lo largo de la historia del pensamiento humano, hoy en día es unánimente admitido como un pilar fundamental de la esencia del hombre, un derecho “natural” e “innato” y, por supuesto, “fundamental”. No así ha ocurrido con el concepto de propiedad, comunmente etiquetado como “privada” o “pública”, sobre cuyo fundamento ha pivotado, oscilado y pendulado, igualmente la concepción del ser humano como sujeto -u objeto- político, en función de si constituye un derecho o nó, innato o culturalmente construido.

Lo que sí ha logrado el profesor Pipes, de una manera rigurosa y honesta, a mi juicio, es formular la teoría de la íntima correlación entre ambos conceptos, al modo de vasos comunicantes, de tal modo que el uno, con el otro, se encuentran unidos en una relación de interdependencia tal que que la ausencia de cualquiera de ellos -y en especial, el controvertido derecho de propiedad- condiciona gravemente la fortaleza del otro, en este caso el derecho a la libertad.

Empieza el libro en sud dos primeros capítulos, ofreciendo una definición del concepto de propiedad a lo largo de la historia tanto de la idea de la libertad como de la institución en sí. En los dos capítulos siguientes, desarrolla y concreta este concepto en la historia de Inglaterra y Rusia, como ejemplos extremos de la distinta concepción del derecho propiedad y sus consecuencias en términos de protección y desarrollo de la libertad política. El último capítulo contiene un análisis de la propiedad en el siglo XX y los riesgos, según el autor, de que se resienta y altere el equilibro entre ambos derechos por causa de las agresiones del estado del bienestar en la democracia occidental -principalmente la norteamericana.

No me considero, verdaderamente, capacitado para decantarme por una postura u otra, a favor o en contra de la tesis del libro. En todo caso, no para formular y expresar coherentemente mi propia opinión, lo cual sería irresponsable y desafortunado. Mi valoración sobre el libro, eso sí, es muy positiva. Entiendo que el tema a tratar, no estrictamente literario, pudiera ser árido o pesado, pero la redacción del libro -sin duda por la propia traducción de Josefina Diego- es ligera, amena, fácilmente entendible, sin abuso de compleja terminología o conceptos excesivamente técnicos. Este trabajo es muy interesante y muy recomendable. Sirva igualmente mi modesta reseña para rendir homenaje al autor recientemente fallecido. Un saludo.

INDICE

Cap I: La idea de propiedad

Cap II: La institución de la propiedad

Cap III: Inglaterra y el nacimiento de la democracia parlamentaria

Cap IV: La Rusia Patrimonial

CapV: La propiedad en el s. XX

SINOPSIS EDITOIAL: Richard Pipes analiza dos conceptos fundamentales, propiedad y libertad, desde perspectivas históricas y filosóficas. Pipes- profesor de Historia en la Universidad de Harvard y especialista en historia rusa- toma como ejemplo dos naciones que los han entendido de maneras distintas a lo largo de su historia, Inglaterra y Rusia, para revelar los vínculos entre propiedad privada y la noción de libertad como un derecho inherente al ser humano. 
Sin embargo, es un análisis que no se limita a cuestiones económicas. es un recorrido complejo y enriquecedor, que destaca por su impecable narrativa, a lo largo de la historia de la lucha del ser humano por hacer valer su individualismo e integrarse plenamente en su sociedad.

BIOGRAFIA: RICHARD PIPES, historiador poláco, de origen judío, nacido en Cieszyn, Silesia, Polonia el 11 de julio de 1923 y fallecido en Cambridge, Massachusetts, E.E.U.U. EL 17 de mayo de 2018). Su especialización en estudios sobre Rusia le favoreción ser director del Russian Research Center de la Universidad de Harvard y miembro del Consejo de Seguridad Nacional de Ronald Reagan.

Sus obras son, entre otras: The Formation of the Soviet Union: Communism and Nationalism, 1917–1923 (Harvard University Press, 1954); Russia under the Old Regime (Charles Scribner’s Sons, 1974); The Russian Revolution (1990); Communism: The Vanished Specter (1994); Concise History of the Russian Revolution (1995); Three «Whys» of the Russian Revolution (1997); también ha sido editor de The Unknown Lenin: From the Secret Archives (Yale University Press, 1996.

propiedad y libertad: dos conceptos inseparables a lo largo de la-richard pipes-9788475065038

  • Nº de páginas: 406 págs.
  • Editorial; TURNER
  • Traductor: Josefina de Diego 
  • ISBN: 9788475065038


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«regina beatissima», de juan garcia atienza: la leyenda negra es «the new black»


«En ambos reinos se estaba llegando a una crisis interna en la que no se planteaba únicamente el enfrentamiento entre dos facciones polñiticas rivales, provocado en gran parte por la misma falta de sentidos de ambos soberanos, que no fueron capaces de establecer un orden interno de pacíficas libertades, sino que permitieron que los conversos y sus antiguos hermanos judíos, se enfrentaran frontalmente» J.G.A.

En un mundo ideal, todo acercamiento serio a un personaje histórico debería ser objetivo, integral y contrastado documentalmente. Obviamente, como últimamente andamos escasos de mundos ideales, debemos conformarnos con este que nos ha tocado vivir. Por eso, la alternativa es un poco menos ambiciosa y el relato de los acontecimientos históricos viene cargado, consciente o inconscientemente – dependiendo de la “maldad” del autor- de prejuicios ideológicos, ignorancias, leyendas infundadas y, más habitualmente de lo que pretendemos reconocer, manipulación directa e interesada.

Cabe decir, para evitar equivocos inmediatamente, que el presente ensayo de Juan García Atienza no se encuentra en este último caso. No ocurre así, sin embargo, con el personaje histórico sobre el que se centra, la reina Isabel la Católica, tan significativo, tan icónico, que pocos personajes históricos, salvo quizás su homónima inglesa, han conseguido suscitar tanto interés, tanta polémica y tanta controversia, engrandecida por su importancia histórica y su ubicación clave en un momento crucial de nuestro país e, indiscutiblemente, del de todo el continente europeo, como poco, y del continente americano, también.

El autor expresa a lo largo de su ensayo la intención de acercarse al personaje sin la carga ideológica que ha caracterizado el estudio histórico del mismo. La figura de la reina (pretendidamente) santa se ha utilizado con fines propagandísticos, para el afianzamiento moral e histórico del régimen franquista, por ejemplo, erigiendose en una impostada continuidad histórica de un destino trascendente y espiritual iniciado por la reina castellana.

Ello ha traido consigo la ocultación de hitos en su gobierno que pudieran empañar el brillo atribuido, o directamente la manipulación en la interpretación de su significación histórica.

Sin ánimo de exhaustividad, lo cual excedería mi capacidad y desbordaría el carácter de nuestro pequeño espacio de intercambio, podemos atender a tres o cuatro puntos que desarrolla el ensayo de Juan García Atienza.

El primero de ellos, ya anotado anteriormente, y el más importante a mi juicio, es la voluntad expresada del autor de romper con una corriente hagiográfica, acrítica y parcial en el estudio histórico del reinado de los Reyes Católicos y de la figura de Isabel la Católica. Los restantes, se concretan y desarrollan en alguno de los acontecimientos y hechos del reinado de Isabel I que han sido frecuentemente distorsionados u ocultados.

Ya hemos hablado de la apropiación franquista de la figura de los Reyes Católicos, incluso de sus símbolos, para dotarse de legitimidad y sustento ideológico y moral. Puede que sea el ejemplo más claro. Ello ha tenido como consecuencia que la figura de la reina haya sido idealizada y acomodada al relato politico imperante.

Obviamente, hoy en día, nuestra sociedad es más libre y esta más abierta a la crítica, aunque también nos cuesta liberarnos de esa servidumbre voluntaria que son los viejos hábitos y esteretipos y las bananlizaciones producto de la pereza o la inmediatez.

Apenas se indaga, por ejemplo, en las oscuras maniobras en su acceso a la corona de Castilla, no tan distintas de las conjuras, extrañas alianzas, traiciones y engaños que se daban en otros reinos en otras épocas, pasadas y futuras. Tampoco sobre su matrimonio con Fernando de Aragón, “subsanado” con posterioridad, el cual estuvo muy lejos de ser un matrimonio por amor y mucho más cerca de ser un buen matrionio de conveniencia y una carta más entre otras muchas que se barajaron.

Otro hecho ominoso de su reinado que suele pasarse por alto es la expulsión de los judíos y el yugo a los conversos, o la expulsión de los moriscos, que tan mal hizo a una población autoctona, más o menos permeable a la integración y asimilación -cultural y política-, pero excluidos radicalmente por su condición religiosa y su constante mancha de un concepto monolítico, uniforme, ultraconservador y mesianico que orientó el ideario y voluntad de la reina castellana durante toda su vida.

La creación de la Nueva Inquisición es un elemento muy importante de la leyenda negra española que merece ser estudiado y denigrado, como tan bien han sabido llevar a cabo hasta la distorsión abosoluta otros historiadores y panfletarios igualmente interesados y parciales, animados por rivalidades históricas con nuestro país.

Finalmente, yo destacaría, la ficticia idílica armonía entre el matrimonio de los Reyes Católicos y la, igualmente ficticia, armonía entre ambos reinos. Si bién fue voluntad de los monarcas en todo momento dar continuidad a la dinastía mediante una habil política matrimonial de sus descendientes, frustrada por los avatares de la vida y de la muerte, nunca existió una paridad entre ambos reinos, ni una cohesión administrativa, tal y como se pone de manifiesto en las tensiones que hoy sufrimos, de rabiosa actualidad.

Respecto a los aspectos formales, el ensayo me ha parecido algo lento y pesado. Es claro que no es un relato novelado y la prosa del autor es muy correcta, pero, como todo el mundo, encuentro altibajos en mi lectura, quizás debido a mi propias faltas que a las de Juan García Atienza. Con todo, pese a ser una publicación de hace quince años, es una lectura interesante y recomendable que cumple con su objetivo.

Un saludo.

SINOPSIS EDITORIAL: ¿Santa o pecadora? En este ensayo, Juan G. Atienza indaga en las páginas más oscuras de la vida y del quehacer de la Reina Católica. Una mujer tan marcada por el ansia de poder que no dudó en salvar cualquier obstáculo para alcanzarlo.

Distintos hechos luctuosos allanaron su camino: el sospechoso fallecimiento de su hermano, el infante Alfonso, que dirimió la cuestión sucesoria; las extrañas circunstancias de la muerte de don Pedro Girón, el brutal maestre de Alcántara, cuando se encontraba de camino de sus esponsales con la princesa, a quien no le convenía este enlace; o la del mismo rey Enrique IV, que motivó su inmediata y nada improvisada proclamación como soberana. Además, un matrimonio por razón de Estado, que contribuiría a engrandecer el reino de Castilla con una activa política imperialista; el establecimiento de la Inquisición,que provocó una atmósfera de terror generalizado; la dramática expulsión de los judíos… Son algunos de los episodios revisados a la luz de nuevas investigaciones.

Un estudio crítico que examina el controvertido reinado de una reina mesiánica y devota, quien sentó las bases de un Estado teocrático imperialista. El autor indaga en los aspectos más negros de su política, muchas veces solapados por diferentes intereses, tan alejados de cualquier aureola de santidad que sirviera de modelo ejemplar a los católicos.

BIOGRAFIA:  Juan G. Atienza (Valencia 1930 – Madrid 2011) licenciado en Filología Románica por la Universidad Complutense de Madrid. En 1976 publicó su primer ensayo histórico, Los santos imposibles. Otras obras fueron Guía de la España mágicaLa rebelión del GrialNuestra Señora de LuciferLa meta secreta de los templariosLa mística solar de los templariosLos lugares templarios españolesMonjes y monasterios españoles en la Edad MediaLa ruta sagradaCaminos de SefaradAntología de leyendas (4 vols.), La cara oculta de Felipe IILos pecados de la Iglesia y Los peregrinos del Camino de Santiago entre otros). También trabajó, tempranamente, en cine y TV.

  • Fecha de publicación 19/09/2002
  • Páginas 416
  • ISBN 9788497340731
  • Formato16x24 Rústica


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«vida de los doce césares», de cayo suetonio tranquilo: crónicas y chascarrillos del imperio; cuando la prensa rosa se escribía en piedra.


«Que Augusto mantuviera relaciones adulteras, ni siquiera sus amigos lo niegan, aunque lo justifican afirmando que las mantuvo movido, no por la lujuria, sino por la astucia, a fin de averiguar más facilmente, a traves de sus esposa, los planes de sus enemigos» C.S.T

Pocas obras de autores clásicos griegos o latinos reunen en si mismas las virtudes de la erudición y la amenidad como la “Vida de los doce Césares” de Suetonio. Quizás, salvo la magnífica obra de Ovidio, “Las metamorfosis”; algunas de las biografias de Plutarco; o la formidable “Vidas, opiniones y sentencias de los filósofos más ilustres”, de Diogenes Laercio, con la que comparte, si no estilo, al menos sí un contenido anecdótico y ligero cargado de intención lúdica y valor histórico incalculable.

Esta obra reune la biografía de los doce Césares de Roma. El primero, del que proviene el nombre y el que llegó a sentar las bases del Imperio, aunque nunca llegó a ser emperador, el divino Julio Cesar, y los sucesivos once emperadores que le siguieron: su sobrino Augusto, Tiberio, Caligula, Claudio, Neron, Galba, Vitelio, Oton, Vespasiano, Tito y Domiciano.

No pretendiendo ser más que una relación de la vida y hechos de los personajes biografiados, con una misma estructura esquemática que va desde los origenes familiares, juventud, hechos releantes de su vida pública y muerte y herederos, su estilo ameno y sencillo y la profusión de anecdotas de la vida intima y personal de los protagonistas hace de esta obra un relato fácil de leer, divertido y muy interesante desde el punto de vista histórico.

Alejada de las eruditas y, a veces, plúmbeas obras biográficas, la relacion de anecdotas y curiosidades no permiten acercarnos de una manera directa y divertida a las costumbres y a la vida real de los personajes estudiados, sin perder el interés en el relato histórico.

Una obra muy recomendable y muy interesante en tanto que nos permite acceder a una obra clásica, generalmente resesrvadas a estudiosos o personas con un interés más elevado, académico o profesional, siendo unos meros profanos en el mundo greco latino y simple aficionados que quieren aprender un poco más sbre tan apasionante periodo histórico.

Además, la edición de Alfonso Cuatrecasas tiene un pequeño estudio previo de unas cincuenta páginas, sobre la obra y el periodo que relata, con cuadro cronológico y bibliografía, que ayuda mucho a aquel que quiera profundizar un poco más.

Finalmente, un consejo: no dejeis de acompañar vuestra lectura con un paseo por el Foro romano y el Palatino, paseando “in situ” por los lugares y ambientes que recoge el el libro. Una autentica delicia, aunque no esté al alcance de todos.

Un saludo

 

CAYO SUETONIO TRANQUILO: Escritor y biógrafo romano, nacido en Hipona (actual Argelia) el año 70 d.c. y fallecido el año 126 d.c. Fue coetaneo de los emperadores Trajano, del que fue tribuno y también encargado de lal bibliotecas y archivos públicos, y del emperador Adriano, del que fue amigo y secretario personal, hasta que cayó en desgracia. Fue amigo igualmente del historiador Plinio el Joven, por quien sabemos la mayoría de sus datos biograficos. Ejerció como profesor y abogado. Sus obras más importantes, las únicas que se han conservado hasta nuestros días, son «De vitam duodecim Cesarum» y «De viri ilustribus». Fue un autor de mucha influencia en la Edad Media.

SINOPSIS EDITORIAL: A lo largo de sus trece siglos de historia, Roma vivió tres momentos cruciales que marcaron de modo irreversible su evolución política y humana y, a través de ella, la de una gran parte de la actual Europa: la creación de la República tras la expulsión de los reyes etruscos (509 a. C.); la transformación de la República en Imperio (27 a. C.), y, por último, la división definitiva del Imperio en dos partes, Oriental y Occidental, llevada a cabo por Teodosio, con la imposición del cristianismo como religión del Imperio (395 d. C.).
La obra principal de Cayo Suetonio Tranquilo, Vida de los doce césares, nos traslada como espectadores de excepción a uno de esos hitos -el de la paulatina sustitución de la República por el Imperio-, introduciéndonos en la vida de los doce primeros hombres que pergeñaron, concretaron y consolidaron esa nueva estructura política del Estado romano, algunos de los cuales se hicieron tristemente célebres debido a su crueldad, desmanes y abusos de toda índole, si bien todos ellos forman la galería de personajes más conocidos y populares de la antigua Roma.

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  • Editorial: Espasa Calpe S.A.
  • Colección: Austral-Ciencias y Humanidades
  • Traducción y edición: Alfonso Cuatrecasas
  • ISBN: 978-84-670-2701-3
  • Páginas: 476 


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«moros y cristianos. la gran aventura de la españa medieval», de josé javier esparza: los polvos de antaño que componen el molde de la historia que somos.


«¿Una ciudad mora pidiendo auxilio a un rey cristiano contra el rey de los moros? Si, porque en esta España de moros y cristianos, y en este momento de nuestra historia, los campos no estan definidos de manera tajante. En la España mora sigue habiendo numerosísimos mozárabes, es decir, cristianos bajo poder musulmán, que porbablemente constituían todavía la mayoría de población de Al-Ándalus.» J.J.E.

¿No os ha pasado alguna vez, estar reunidos un grupo de amigos ante el televisor para comentar y debatir el último giro de acontecimientos en programas culturales como “Sálvame” y su magnífica versión premium, sólo apta para eruditos: “Sálvame de luxe”, o cualquier otro de similar altura intelectual como “Gra hermano” o “La isla” y, de repente, preguntaros angustiados, todos al unísono, si alguna vez pudiera haber una sóla obra, aunque sea escrita, que no fuera tan densa y espesa, tan restrictiva para la inmensa mayoría, una obra que aunara erudición y divulgación? ¿Y, desolados ante la falta de respuesta, sumiros en una profunda reflexión introspectiva y cuestionaros el sentido de la vida, del mundo y del universo, y buscar consuelo en la profunda y vasta y variada oferta cultural de cadenas televisivas como Tele 5, resignados ante el árido, complejo y elitista panorama del espectro televisivo actual? No, seguro que no. Y como inocentada, la verdad, tampoco ha sido una maravilla.

Pero, sin embargo, podeis estar de enhorabuena porque, esta vez en serio, existe un autor que se ha atrevido a llevar a cabo la tarea imaginada pero nunca resuelta. Con osadía extrema se ha adentrado en el mercado editorial, ofreciendo al público una serie de ensayos históricos, sobre la historia de España, pretendiendo conjugar, nada menos, la divulgación, el entretenimiento y el rigor. Y ha conseguido una difusión digna del mejor Dan Brown siendo además, que sus fuentes son las históricas, y su relato tiene una base científica, salvo lagunas que hay que rellenar con especulaciones fundadas, razonadas y bien argumentadas.

Esta obra, “Moros y cristianos”, estudia el periodo histórico que abarca desde el s. X hasta la batalla de las Navas de Tolosa en el año 1212. Es el segundo libro de una trilogía formada por el libro titulado “La Aventura del Reino de Asturias” dedicado al periodo comprendido entre la invasión del la península por los árabes en el año 711 hasta el asiglo X, con la creación del Reino de Leon, y otro tercer libro titulado “Santiago y cierra España” que abarca desde la batalla de las Navas de Tolosa hasta la unificación de los reinos de España con los Reyes Católicos y la toma de toma de Granada en 1492.

El estilo de la presente obra ayuda a asimilar la profusión de datos y nombres que va desgranando a lo largo del relato de la historia de al España Medieval. No encontrando otra manera más lógica que hacerlo siguiendo un orden cronológico, el autor, sin embargo, muestra un gran esfuerzo por la amenidad, la claridad, la precisión y la concisión. Su prosa es sencilla y descriptiva. Su contenido hace hincapíe en los personajes y sus vicisitudes, más que en los acontecimientos en sí. Esto ayuda a seguir el discurso temporal relacionando y contextualizando fechas y lugares con cada personaje, facilitando, de este modo, una mirada en perspectiva sobre los acontecimientos de este largo proceso histórico de origen, transformación y consolidación de los distintos reinos cristianos de la Peníncula Ibérica.

A modo de travellin cinematográfico, uno va pasando las hojas del libro sin apenas darse cuenta, disfrutando de las aventuras de nuestros antepasados, incluso más divertidas y delirantes que las de la ficción.

Es precisamente, la gran labor de Jose Javier Esparza como narrador la que hace que este ensayo histórico se disfrute enteramente como una novela, Y por eso es un libro muy recomendable para iniciarse de un modo ameno y erudito en la historia de la España Medieval: un periodo tan extenso en el tiempo, tan complejo y tan importante en la configuración de la nuestra sociedad actual (a nivel jurídico, político, social y cultural).

Un saludo.

BIOGRAFIA: Nacido en Valencia en 1963. Licenciado en Ciencias de la Información (Periodismo) por la Complutense, ha cursado estudios de doctorado en Ciencias Políticas y en Historia en la misma universidad, y ampliado estudios en el IEP de Aix-en-Provence (Francia). Formado en las redacciones de ABC y YA, fue redactor jefe de la revista cultural PUNTO Y COMA, jefe de Cultura del semanario EL SIGLO, responsable de comunicación de la Fundación BBV (hoy BBVA) y director de la revista de pensamiento HESPERIDES. Colaborador de la RAZON ESPAÑOLA, de Gonzalo Fernández de la Mora. Desde 1991 hasta 2012 escribió diariamente la crítica de televisión para los periódicos del GRUPO VOCENTO a través de la agencia COLPISA. Vinculado políticamente al PARTIDO POPULAR (PP). Después formó parte del grupo promotor de la revista cultural EL MANIFIESTO y dirigió el diario digital elmanifiesto.com antes de incorporarse a la cadena COPE. Desde 2010 pasó a formar parte del equipo del GRUPO INTERECONOMIA. Como escritor ha publicado más de veinte libros:
La cruzada del océano: la gran aventura de la conquista de América, 2015; Santiago y cierra, España. El nacimiento de una nación, 2013; Moros y cristianos. La gran aventura de la España medieval, 2011; La gran aventura del Reino de Asturias. Así empezó la Reconquista, 2009
Novela Histórica:El caballero del jabalí blanco, 2012; El Reino del norte, 2014; Los Demonios del Mar, 2016; Héroes españoles de la A a la Z, 2012; El terror rojo en España. Epílogo: el terror blanco, 2007; El Libro negro de Carrillo, 2010; El libro negro de la izquierda española, 2011;
Ensayo:Historia de la Yihad. Catorce siglos de sangre en nombre de Alá, 2015; Juicio a Franco, 2011; En busca de la derecha (perdida), 2010; Guía políticamente incorrecta de la civilización occidental, 2009; Los ocho pecados capitales del arte contemporáneo, 2007; El bienio necio. Crónica del zapaterismo, 2006; El invento del maligno. Informe sobre la televisión, 2001; Las metamorfosis de Fausto. Milagro y tragedia del espíritu de la modernidad (inédito); Curso general de disidencia, 1997; Ejercicios de vértigo, 1994
Novela:El Final de los Tiempos. El dolor, 2002; El Final de los Tiempos II. La muerte, 2007

SINOPSIS EDITORIAL: La historia de este libro empieza donde terminó La gran aventura del Reino de Asturias. Entramos en una España de moros y cristianos donde no siempre es fácil separar historia y leyenda: Asistiremos al nacimiento y expansión de varios reinos cristianos en la península, a su superioridad militar frente al islam y, en definitiva, a la conformación de las identidades históricas y políticas que van a dar lugar a España tal y como hoy la conocemos. Los musulmanes no pondrán las cosas fáciles. Primero, Abderramán III elevará el emirato de Córdoba a la condición de califato y lanzará agresivas campañas contra la cristiandad española. Así vendrán nuevos siglos de guerra sin fin. Finalmente, la batalla de las Navas de Tolosa, en 1212, significará el ocaso definitivo del islam español. Y con ella empezará una etapa nueva.

Moros y cristianos: la gran aventura de la España medieval (Historia Divulgativa nº 2) de [Esparza, José Javier]

  • Nº de páginas: 736 págs.
  • Encuadernación: Tapa dura
  • Editorial: LA ESFERA DE LOS LIBROS
  • ISBN: 9788493210380


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«el partido», de richard mcgregor: el capitalismo «made in china»


“The remarkable and largely overlooked truth about China is that it is still governed on Soviet hardware.” R.M 

Producto de su inteligencia, rendida a su genialidad, Napoleón Bonaparte alumbró una frase sobre China que ha venido citándose desde entonces en cualquier análisis de la realidad de dicho país: cuando China despierte, el mundo temblará.

En cierto modo, China ya ha despertado y el mundo no ha temblado. Al menos no por su despertar sino, ahora, por su recaída en el sueño y la recesión.

Mirándolo en perspectiva, una civilización milenaria que ha aportado a la humanidad gran base de su conocimiento material y espiritual, se encuentra hoy sometida a un proceso de cambio y adaptación desde un régimen político surgido a mediados del siglo pasado, apena 70 años, que es una nimiedad en comparación con su trayectoria y su importancia. Sin embargo la realidad es la que manda y, lejos ya las gestas y logros antiguos, la importancia e influencia actual del régimen chino y su comportamiento económico es determinante para el desarrollo y evolución de la economía global.

El libro objeto de reseña, nos acerca un poco más a la realidad de un régimen dictatorial y sus esfuerzos de conjugar y conciliar dos concepciones políticas y económicas tan dispares como el comunismo y el capitalismo. En realidad el capitalismo con los viejos modos totalitarios maoístas. Y también las maniobras de supervivencia de un aparato político elitista, represor y totalitario, el Partido Comunista Chino, y sus mecanismos de influencia y control sobre la estructura económica del país.

Pese a las expectativas sembradas por subtitulo de la obra, “El mundo secreto de los gobernantes comunistas chinos”, verdaderamente no responde exactamente a lo que se publicita. No es que sea un mal libro, sino que su contenido, al menos a mi parecer, no es tan profundo y sistemático como promete. Abarca distintos aspectos de la estructura económica China  y expone las facciones dentro del partido y sus distintas tendencias respecto del papel que debe adoptar la economía China en la globalizada economía de mercado capitalista. También saca a la luz el alto grado de nepotismo que impregna al régimen comunista chino, donde las distintas familias se reparten el pastel en los distintos sectores de la economía (financiero, tecnológico, energético, etc) intrigando para perpetuarse en el mismo indefinidamente a costa del sufrimiento pasivo de la inane población.   

En resumen, aunque no esencial para profundizar en la realidad política, social y económica de la China actual, si es un libro interesante y ameno que merece la pena leer.

Un saludo

 

SINOPSIS EDITORIAL: El Partido es la esclarecedora investigación de Richard McGregor sobre el Partido Comunista Chino, y el papel fundamental que desempeña en este país desde hace casi un siglo. Muchos libros han examinado el ascenso económico de China, su historial de derechos humanos y la turbulenta historia de sus relaciones internacionales, pero ninguno ha abordado la cuestión central para la comprensión de todos estos temas: cómo funciona el gobierno en el poder comunista. Un retrato magistral y perspicaz.

Richard McGregor, escritor y periodista australiano nacido en 1958. Ha sido el corresponsal jefe en la sección política del periódico The Australian, para Japón y China. También trabajó para “The International Herald Tribune”, la “BBC” y el “Far Eastern Economic Review. Ha trabajado como periodista en Taiwan, Sidney, Melbourne y Camberra. Actualmente es el former bureau chief del “Finacial Times”. Ha recibido varios premios, en 2008 y 2010 el “Society of Publishers in Asia” (SOPA), y el “Editorial Excellence Award” por el reportaje de las revueltas de Xinjiang.

el partido: los secretos de los lideres chinos-richard mcgregor-9788475069470

  • Nº de páginas: 375 págs.
  • Traducción: Laura Vidal
  • Editorial: TURNER
  • ISBN: 9788475069470


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«¿por qué fracasan los países?», de daron acemoglu y james a. robinson: tenemos la receta, nos falta cogerle el punto en la cocina


«Para nuestra teoría, es crucial la relación entre prosperidad e instituciones políticas y económicas inclusivas. Las instituciones económicas inclusivas que hacen respetar los derechos de propiedad crean igualdad de oportunidades y fomentan la inversión en habilidades y nuevas tecnologías.» D.A y J.A.R.


La experiencia nos enseña que existen todo tipo de personas: los listos, los tontos, los trabajadores, los vagos … (vaya, en una sola frase he tirado a la basura todo mi condicionamiento sobre la corrección política en el lenguaje).

Y todos nosotros nos hemos encontrado alguna vez con esas personas que, siendo muy listos, muy tontos, muy trabajadores o muy vagos, tienen una desigual desenvoltura en su trabajo o en su vida social. Algunos que, pese a contar, aparentemente, con unas grandes cualidades humanas, no cesan de arruinar su vida laboral o personal, perdiendo el trabajo o rompiendo sus relaciones afectivas o familiares; esos que decimos que no acaba de consolidar sus expectativas, sus potencialidades, en definitiva, que tiene «mala suerte». Pero normalmente no es cuestión de suerte, es cuestión de sus propias acciones, de su errónea actitud frente a los retos, de su concepción de la vida, de la elecciones que toma a cada momento en sus decisiones. A veces nos decimos que esas personas nunca cambiarán, aunque lo cierto es que todos cambiamos. Eso es facil, lo dificil es cambiar a mejor.


¿No puede pasar lo mismo con los países? ¿Cómo es posible que algunas sociedades evoluciones hacia una economía desarrollada y protectora, plena de bienestar para sus ciudadanos; y otros, en cambio, se vean avocados a la quiebra económica y política? Y ello pese a contar con recursos naturales y con unas condiciones óptimas, a priori, para el progreso y el desarrollo. Ahí también decimos que nunca llegarán a nada, porque ellos («ellos», claro), no son como nosotros.

El libro objeto de reseña no se dedica a las personas, sino a los paises. Sus autores pretenden responder a la pregunta que explicita su título: ¿por qué fracasan los países? La respuesta, aun cuando pueda parecer sencilla (osado que es uno), no lo es tanto. Ni siquiera el sentido común, que a veces nos basta para diagnosticar y predecir el devenir de un «bala perdida», nos puede servir de guía para aventurar una respuesta.


Otros antes que ellos ya propusieron distintas soluciones a la cuestión planteada y Acemoglu y Robinson, rebaten una a una, con ejemplos claros y concretos, las distintas teorías propuestas por otros autores ciertamente reconocidos en el mundo científico. Podríamos pensar que es la geografía, ubicación, climatología, abundancia de recursos y materias primas, etc, la que determina los logros y desarrollo de los países; o la cultura; o las políticas, acertadas o desacertadas de sus líderes. Critican y rebaten las teorías formuladas en ese sentido por economistas como Paul Collier o Jeffrey Sachs, antropólogos como Jared Diamond o sociólogos como Max Weber.

Sin embargo, la tesis del ensayo que comentamos entiende que la clave radica en las instituciones, concretamente el carácter lo que denomina instituciones inclusivas o extractivas en función de su carácter «inclusivo» o «extractivo» en tanto que favorecedoras de la distribución de la riqueza entre sus ciudadanos o, por el contrario la adopción de políticas extractivas, esto es, esquilmadoras de la riqueza de cada país, en beneficio de una élite. Esto, unido a un desarrollo de la tecnología y al favorecimiento de lo que denominan la «destrucción creativa», sienta las bases para un desarrollo económico sostenible que da lugar, en un periodo de tiempo posterior, al progreso económico y al bienestar de las naciones.


El concepto, obviamente, es un poco más complejo, aunque los autores lo desarrollan de un modo claro y sencillo, con amenidad y limpieza y ofreciendo numerosos ejemplos en su apoyo, con un repaso a países como Estados Unidos, Inglaterra, China, URSS, Sierra Leona, Etiopía o Congo y un recorrido por distintas épocas históricas, desde el Imperio Romano, la Conquista de América, la Independencia Americana, la Revolución Francesa, la I Guerra Mundial, la Primavera árabe, etc. Van desarrollando su tesis logrando que este libro pueda ser leído con facilidad por un lector profano en economía, en historia o sociología.


Considero que es un libro muy recomendable. Desarrolla, de un modo atractivo, una respuesta aceptable (al menos teóricamente), al interrogante que todos nos hacemos en estos tiempos de conflicto y cambio ¿cuál es la fórmula del éxito y del fracaso?.
Un saludo

 

 

 

DARON ACEMOGLU, 03/09/1967 es profesor de Economía en el MIT y ha recibido la medalla John Bates Clark en reconocimiento a su contribución al avance de la ciencia y la investigación.

JAMES A. ROBINSON, 1960, es politologo, economista y profesor de la Universidad de Hardvard. Experto en política y eonomía latinoamericana y africana.

Ambos son autores del libro «Economic Origins of Dictadorship and Democracy»

 

RESEÑA EDITORIAL: Que determina que un país sea rico o pobre? Como se explica que, en condiciones similares, en algunos paises haya hambrunas y en otros no? Que papel tiene la politica en estas cuestiones? Que algunas naciones sean mas prosperas que otras, se debe a cuestiones culturales?, a los efectos de la climatologia?, a su ubicacion geografica? No, en absoluto. Ninguna cuestion relativa a la prosperidad de un pais esta relacionada con estos factores, sino que proviene de otro mucho mas tangible: la politica economica que dictaminan sus dirigentes. Son los lideres de cada pais, afirman los reconocidos profesores Daron Acemoglu y James A. Robinson en este libro, quienes determinan con sus politicas la prosperidad de su territorio, y asi ha ocurrido en todos los periodos de la historia, como demuestran en este apasionante estudio.

  • Nº de páginas: 608 págs.
  • Editorial: DEUSTO S.A. EDICIONES
  • Traducción: Marta García Madera
  • ISBN: 9788423412662


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«un mundo de ayer. memorias de un europeo», de stefan zweig: una época que fué, una luz que se apaga.


«En la lengua que había escrito y en la tierra en que mis libros se habían granjeado la amistad de millones de lectores, mi obra literaria fue reducida a cenizas. De manera que ahora soy un ser de ninguna parte, forastero en todas; huésped, en el mejor de los casos. También he perdido a mi patria propiamente dicha, la que había elegido mi corazón, Europa, a partir del momento en que ésta se ha suicidado desgarrándose en dos guerras fratricidas.» S.Z.

El 21 de Febrero de 1941 el escritor austriaco, Stefan Zweig, escribió sus últimas palabras: «Ojalá puedan ver el  amanecer después de esta larga noche. Yo, demasiado impaciente, me voy antes de aquí». Y verdaderamente eran las últimas, por cuanto que días después fue encontrado muerto, junto con su segunda esposa, Lotte, víctima de un último acto de desesperación, su suicidio.

Su impaciencia le llevó a tomar una drástica decisión. Su impaciencia y su pesimismo ante el avance irrefrenable del ejército alemán, que amenazaba con instaurar en Europa un “Reich de mil años” y así hacer desaparecer todo vestigio de una cultura europea, optimista, tolerante, diversa y activa, que moldeó su persona y su carácter, que tanto le dio al escritor vienes y a la que supo corresponder con la totalidad de su obra.

Esta autobiografía, es más bien una biografía intelectual por cuanto que relata la trayectoria pública del escritor, sus años de formación, sus relaciones con artistas e intelectuales: músicos, poetas, novelistas y dramaturgos, eludiendo toda mención a sus relaciones privadas y personales, su familia, su vida y sentimientos íntimos. Es a la vez una disección sociológica de la sociedad europea anterior a la I Guerra Mundial y del periodo de entreguerras, la época de esplendor y decadencia del Imperio Austro-Hungaro.

Testigo de un mundo que ya fue y no será ya jamás, legó a la posteridad este libro triste y nostálgico. Su título, “un mundo de ayer” es bastante significativo respecto del tono general de la obra, el repaso a una vida, el repaso a un mundo pasado, el relato de “los años irrecuperables” de “nuestra generación”, -que esos fueron los títulos inicialmente pensados por Zweig junto con “Europa fue mi vida”-.

El subtítulo, “memorias de un europeo” refleja el sentimiento de pertenencia de Zweig a una cultura supranacional más que a una patria o nación concreta. El desarraigo que le otorgaba su ascendencia judía fue accidental, como él mismo relata; pero su voluntad cosmopolita y paneuropea fue consciente, al igual que la férrea defensa de su individualidad en un mundo obligado a tomar partido entre los dos grandes imperios en guerra. Stefan Zweig se niega a sumarse a la euforia belicista y opta por el exilio y la beligerancia a favor de la paz, a favor del sentimiento nacional europeo, a favor de la universalidad de la cultura.

Tres cosas destacarían en esta obra. En primer lugar, el permanente sentimiento de desolación que rezuma al relatar sus vivencias en contraste con la expresión declarada de optimismo vital que parecía animar su actividad intelectual. Igualmente destaca su privilegiada situación personal lo material –hijo de una acomodada familia judía que le concedió total libertad para orientar su formación de un modo autodidacta y que le posibilitó viajar por todo el mundo sin apenas sufrir estrecheces económicas. Por último, especialmente, es de interés su contacto, a veces de íntima amistad, con las grandes personalidades intelectuales y culturales de su época: Rilke, Verhaeren, Rolland, Rodin, Bazalgette, Strauss, Pirandello, Freud, Bernard Shaw, H.G. Wells, Einstein, Thomas Mann, Joseph Roth, James Joyce, Proust, e incluso Dalí, sobre las cuales desgrana anécdotas y comentarios de sus encuentros, junto con esa aguda capacidad  de penetrar en los caracteres y ofrecernos un bosquejo psicológico de cada uno de ellos.

Creo que es una obra esencial en cuanto a su calidad y amenidad de su relato. Y también respecto de su carácter ejemplarizante y descriptivo, al retratar certeramente un mundo que pudo ser nuestra herencia pero que el desastre de ambas guerras mundiales desbarató y nos hurtó para siempre. Ese mundo en transición entre la época del esplendor, optimismo y seguridad del finales del siglo XIX y nuestro mundo individualista, fragmentado y huérfano de valores universales.

Un saludo. 

 

Stefan Zweig, escritor austriaco, biógrafo, dramaturgo, traductor y novelista nacido en Viena en 1881 y fallecido en Petrópolis, Brasil, el  22 de febrero de 1942. De una familia acomodada, eligió una formación autodidacta y cosmopolita, visitando Europa (Berlín, Paris, Londres,) América (New York, Boston, Filadelfia, Baltimore) y Africa e India.

Durante la I Guerra Mundial destacó por su postura antibelicistas y su negativa a condenar a cualquiera de los dos bando enfrentados. Durante los prolegómenos de la II Guerra Mundial inició un largo exilio del que nunca regresaría.

Su obra se caracteriza por una gran profundidad psicológica de los personajes, tanto en novelas como obras teatrales o biografías, animadas por un espíritu de tolerancia y defensa de la libertad individual frente a la imposición ideológica o restricción cultural nacionalista.

Bibliografía escogida

Teatro: Thersite, 1907; Jeremias, 1916. Ficción: Carta de una desconocida, 1927; Veinticuatro horas en la vida de una mujer, 1929; Novela de ajedrez, 1941. Biografías: Fouché, el genio tenebroso, 1929; Americo Vespucio. La historia de un error histórico, 1931; María Antonieta, 1932; María Estuardo, 1934; Erasmo de Rotterdam, 1934; Tres Maestros: Balzac, Dickens, Dostoievski.; Castellio contra Calvino, Conciencia contra Violencia. Autobiografía: El mundo de ayer, publicado tras su muerte.

SINOPSIS EDITORIAL: El mundo de ayer es uno de los más conmovedores y atractivos testimonios de nuestro pasado reciente, escrito además con mano maestra por un europeo empapado de civilización y nostalgia por un mundo, el suyo, que se iba desintegrando a pasos agigantados. Escritor extraordinariamente popular y testigo de excepción de los cambios que convulsionaron la Europa del siglo XX entre las dos guerras mundiales, Zweig recuerda, desposeído y en tierra extraña, en unas circunstancias personales de insospechado dramatismo, los momentos fundamentales de su vida, paralela en mucho a la desmembración de aquella Europa central que se quería más libre y segura, al abrigo de la locura y la tormenta. El resultado es un libro capital, uno de los mejores de Zweig y referencia inexcusable para entender los desvaríos de un siglo devastador.

 Portada El mundo de ayer

  • Colección: El Acantilado, 44
  • Traducción: J. Fontcuberta  y A. Orzeszek
  • ISBN: 978-84-95359-49-0
  • Nº de edición: 20ª
  • Formato: 13×21 cm
  • Páginas: 552


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«para acabar con todas las guerras» (ensayo) de adam hochschild, cuando la euforia de la guerra envenenó los corazones


«Desde el principio, decenas de miles de personas de ambos bandos reconocieron en la guerra la catástrofe que era. Creían que el inevitable coste en vidas no merecía la pena, y algunos de ellos anticiparon con trágica claridad al menos parte de la pesadilla en la que se sumiría Europa como consecuencia de la misma y lo expresaron públicamente. Además, dijeron que lo que pensaban en una época en la que era necesario tener mucho valor para hacerlo, ya que el ambiente estaba cargado de un ferviente nacionalismo y un desprecio por los disidentes que a veces se traducía en violencia» A.H

En 1914, la civilización europea emprendió un camino por el cual, lejos de cumplirse los designios del presidente norteamericano W. Wilson en el sentido de iniciar “una guerra que acabaría con todas las guerras”, al término de la misma se construiría “una paz para acabar con la paz”, tan inestable, tan desproporcionada, tan abusiva, que se constituiría en la excusa inmediata para el estallido de la posterior II Guerra Mundial.

En efecto, como coincidieron en reconocer numerosos contemporáneos, la percepción de la sociedad británica o francesa, y no digamos la opinión pública alemana, y la mayor parte de sus dirigentes, estaban a favor de una confrontación militar que consideraban inevitable, necesaria e, incluso, beneficiosa. Más aún, dada la escalada militarista y la permanente tensión y conflicto político existente entre las distintas potencias, apenas hubo voces discrepantes, salvo muy pocas excepciones, que supieran formular sus protestas en ese momento y manifestar su oposición a la gran catástrofe a que daría lugar.

Numerosos testimonios, biografías, ensayos históricos, reportajes periodísticos y obras de ficción como novelas  y poesías, relatan las ansias contenidas que se iban acumulando en el periodo previo al estallido del conflicto y el posterior entusiasmo desbordante con el que los responsables políticos y los ciudadanos voluntarios acogieron la posibilidad de acudir al frente y luchar –morir- en una guerra que preveían rápida, contundente e indolora.

La realidad de la guerra fue muy distinta, tal y como relatan las desgraciadas estadísticas de fallecidos -civiles y militares-, los estudios sobre las cuantiosas pérdidas económicas y la fractura de una concepción del mundo que definitivamente abandona el siglo XIX para abocarse de lleno al siglo XX.

Como muy bien relata Hochschild, la Primera Guerra Mundial supuso un cambio drástico para la civilización occidental. A nivel político supuso el derrumbe definitivo del imperio otomano, sustentado durante mucho tiempo por la endeble ficción de su carcasa administrativa. También trajo consigo la metástasis del Imperio Ruso que devino en el cáncer revolucionario y posterior régimen estalinista, que tantas vidas segó. También feneció el Imperio Astro-Hùngaro y su acharolada pretenciosidad, configurado como una amalgama insoluble de etnias y culturas regida por una ineficaz bicefalia.

Igualmente, la contribución al esfuerzo bélico de los territorios de Africa y Asia sujetos al mandato imperialista británico y francés inoculó el virus de la autoconciencia y la determinación que iniciaría el declive del imperialismo y el fin del colonialismo, aunque permanecería adormecido y latente hasta el fin de la II Guerra Mundial.  

A nivel estrictamente militar, supuso, por primera vez la  incorporación de la industria al esfuerzo bélico mediante la creación de  innovaciones técnicas orientadas específicamente hacia su aplicación militar, como fueron el alambre de espino, el lanzallamas, el tanque; o el empleo masivo y sistemático de aquellas otras que, si bien ya existían con anterioridad, como el submarino, el dirigible, la ametralladora o el aeroplano, nunca antes se habían utilizado entre potencias europeas.

Las peores consecuencias de esta “gran guerra” fueron sobre todo las ingentes pérdidas humanas y la devastación de territorios y poblaciones, llegando a alcanzar, según estadísticas generalmente aceptadas, la cifra de ocho millones de combatientes muertos.

El libro objeto de reseña nos cuenta, con la amenidad propia de una crónica periodística, la historia de la guerra mundial vista desde la perspectiva de la retaguardia británica. No pretende ofrecer un relato exhaustivamente detallado de la campaña bélica ni de las repercusiones políticas o sociales de este primer gran conflicto del siglo XX. Simplemente nos entrega la semblanza biográfica de una serie de personajes históricos, todos ellos británicos, que fueron voces discordantes en el gran corifeo belicista.

Desde el Jubileo de la Reina Victoria de 1887 hasta el fin de la guerra, aparecen por sus páginas, en un sencillo entramado de biografías hilvanadas, personajes como Pankhurst, las sufragistas inglesas que pasaron de un activismo radical contra el Primer Ministro Lloyd George a una defensa cerrada e igualmente radical a favor del belicismo –salvo Sylvia, cuya coherencia intelectual le impidió adherirse a la causa bélica en la que, a su juicio enfrentaba a la clase trabajadora, independientemente de su nacionalidad, para garantizar y favorecer los intereses de la élite gobernante. Junto a ella, el fundador del Partido Laborista Independiente, el pacifista y socialista James Keir Hardie; o el filósofo Bertrand Russel, también opositor a la guerra, que sufrió de ostracismo y persecución política –aunque fue tratado con el “rigor” que correspondía a su clase social.

Igualmente nos acerca a la biografía de Charlotte Despard, dama inglesa de alta alcurnia que se caracterizó por un enfervorizado activismo en pro de las reformas sociales y en contra de una guerra que, casualmente comandaba su hermano John French, conde de Ypres, jefe del Estado Mayor Imperial de marzo de 1912 a abril de 1914, sustituido posteriormente por Douglas Haigh. También se cruza en el relato Alfred Milner, el administrador colonial de Sudáfrica que posteriormente fue nombrado miembro del Gabinete de Guerra y administrador colonia.

Es este un libro muy recomendable como complemento a otros como el libro ya reseñado de Sebastian Haffner, centrado en el ámbito sociológico del Reich alemán; o un libro más general, sobre las causas históricas de la guerra como “1914” de Margaret McMillan; o libros más técnicos como “La Primera Guerra Mundial” de Hew Strachan o “1914. El año de la catástrofe de Max Hastings. También, dentro del género narrativo son de destacar otras obras “El miedo”. Gabriel Chevallier. “14”, de Echenoz, “Tempestades de acero”. Ernst Jünger. “Las aventuras del buen soldado Svejk”. Jaroslav Hasek. “El final del desfile”. Ford Madox Ford. Así como biografías como la de Robert Graves o Stefan Zweig que abarcaron dicho periodo.

Un saludo.  

Adam Hochschild, escritor, periodista e historiador nacido en Nueva York en 1942.)  En 1998 publicó  El fantasma del rey Leopoldo, una historia de la conquista y colonización del Estado Libre del Congo por el Rey Leopoldo II de Bélgica. Con este libro ganó el premio Duff Cooper en Inglaterra y fue finalista en el del National Book Critics Circle de Estados Unidos. Su libro Enterrad las cadenas, publicado en 2005 acerca del movimiento antiesclavista en el Imperio Británico fue también finalista del National Book Award. Hochschild ha escrito también para la revistas The New Yorker, Harper’s Magazine, The New York Review of Books, The New York Times Magazine, y The Nation.

Para acabar con todas las guerras

  • traductor: FONTAL, YOLANDA; SARDIÑA,
  •  editorial: PENINSULA
  •  año de edición: 2013
  •  páginas: 624
  •  isbn: 978-84-9942-179-7

 


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«los siete pecados capitales del imperio alemán en la primera guerra mundial» (ensayo) de sebastian haffner: la conjunción del odio, el azar y la razón política provocaron el infierno.


“En lugar de cuestionarse por qué se embarcaron en la guerra y luego la perdieron, se han convencido una y otra vez de que ellos no fueron los culpables y de que, en realidad, la habían ganado. El resto, todo lo demás, fue fruto del “destino” S.H.

Como en todo proceso histórico, respecto de la Primera Guerra Mundial existe un hecho desencadenante como causa inmediata pero existe también una causa mediata que ha ido madurando y gestándose en un periodo más largo y que ha favorecido el sustrato sobre el que, finalmente, florece tal acontecimiento histórico.

Es comúnmente aceptada la fecha de 28 de Julio de 1914 como inicio de la Primera Guerra Mundial, con la declaración oficial de guerra por parte del Imperio Austro-Húngaro contra Serbia, cuyo pistoletazo de salida (literalmente) fue el magnicidio ocurrido en Sarajevo con fecha 28 de Junio  contra el heredero del Imperio Austro-Húngaro, el archiduque Francisco Fernando.

Hasta el 11 de Noviembre de 1918 se fueron desgranando los acontecimientos, malévolamente colocados por el destino o la ceguera de los hombres, que fueron cayendo como hilera de fichas de dominó, dejando el tablero de juego europeo, y mundial, terriblemente devastado. Y no solo en cuanto a pérdidas humanas y grandes pérdidas materiales de lo que fue, verdaderamente, la “Gran Guerra”, en cuanto a sus terribles estadísticas, nunca sufridas por la humanidad hasta esa fecha, sino principalmente por dejar en el campo europeo los rescoldos de lo que pocos años después estallaría con el auge de los totalitarismos fascistas y comunistas y que culminaría con la gran devastación de la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría.  

En efecto, la intrincada y complicada relación entre las distintas potencias mundiales del momento; el precario equilibrio de fuerzas en pugna; el lento derrumbe del Imperio Otomano (en palabras del Zar Nicolás I “el hombre enfermo de Europa”) cuya fragmentación estimuló las apetencias italianas, y la creación de nuevos nacionalismos y estados en Grecia, Serbia, Armenia, Bulgaria, Montenegro, Albania, etc; el creciente militarismo del Imperio Alemán que era presentido como una amenaza por parte de Gran Bretaña (en su imperio de ultramar), por Francia (respecto de las regiones de Alsacia y Lorena) y por el Imperio Ruso (respecto de su posición en los Balcanes y las frontera orientales de Polonia y Ucrania); y, finalmente, la ambición del Imperio Alemán, aspirante a la hegemonía continental y colonial, fueron determinantes para la génesis y expansión del conflicto.

Desde el fin de la Guerra Franco-Prusiana de 1870 se fue gestando en Europa una especie de “Guerra Fría” que se ha denominado históricamente como la “Paz Armada”. En este periodo se van fraguando las tensiones y conflictos latentes entre las potencia europeas que culminarían en la guerra del 14. Al igual que en periodo de posguerra posterior a 1945, se van formando bloques de intereses, muchas veces matrimonios de conveniencia malamente avenidos pero unidos por un miedo común.

Así se forma en 1882 la Triple Alianza, formada por las potencias centrales de Alemania, Austria-Hungría e Italia (que posteriormente se encuadraría en el bando de los aliados) y la Triple Entente en 1907 entre Rusia, Francia e Inglaterra a pesar de que ingleses y franceses mantenían un conflicto a causa de Sudán e ingleses y rusos mantenían posturas hostiles en torno a Oriente Medio. Sin embargo la prevención frente a un emergente enemigo común, Alemania, fomentó una unión de intereses que, a la larga, provocó su inclusión en el conflicto.

A partir de la raíz del asesinato del archiduque, (28 Junio) Austria-Hungría declara la guerra a Serbia ante su negativa a acatar las condiciones de investigación del magnicidio (28 de Julio). El Imperio Ruso, aliado de Serbia, procede a la movilización general de sus tropas (29 Julio) y, a su vez, el Imperio alemán dirige un ultimátum a Rusia estimando que dicha movilización es un acto de guerra, declarando la guerra el 1 de Agosto. Francia, aliado de Rusia, adopta medidas defensivas  en su frontera con Alemania que provoca que esta le declare la guerra (4 de Agosto). Con la invasión alemana de Bélgica, estado neutral, entra en el conflicto Inglaterra. Japón lanza un ultimátum a Alemania el 23 de Agosto por la retirada en la zona de Jiaozhou (China). Turquía y Bulgaria se alían con la Triple Alianza en 1915. Italia, Rumanía, se incorporan en 1915 al bando de la Triple Entente; posteriormente se incorpora Estados Unidos en Abril de 1917 por el inicio por parte de Alemania de la guerra submarina en el Atlántico.

Pese a las espectaculares victorias alemanas, su pujante empuje militar y su audaces y geniales iniciativas bélicas, roto el frente en Macedonia, Bulgaria se rinde. Igualmente hace el Imperio otomano ante la ofensiva inglesa en Palestina y Bagdad. Por su parte, Austria cede ante el avance Italiano y se rinde. Alemania se queda sola y no puede culminar su última ofensiva contra París.

El 11 de Noviembre de 1918 finaliza una guerra que ha contado con distintos escenarios en todo el mundo, en Europa  (en Francia, frente occidental; en Rusia, Polonia y Cáucaso, frente oriental; en los Balcanes y los Dardanelos; en Italia),  en el Oriente Medio y Extremo Oriente,  en África, en el Pacífico y en el Atlántico. Intervinieron multitud de colonias como Australia, India, Nueva Zelanda, Sudáfrica, y países como Canadá o Portugal.

Atrás quedaron incontables muertos y el fin de una era, el siglo XIX, que finalizó en 1914 y del que surgió un nuevo orden mundial; con él sucumbieron el Imperio Alemán, el Imperio Austro-Húngaro, el Imperio Ruso, el Imperio Otomano y se crearon nuevos naciones independientes como Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Yugoslavia, Checoslovaquia, y la separación definitiva de Austria y Hungría.

Esta es la escueta cronología de los hechos admitida de común acuerdo.

Al respecto, sobre las causas que dieron lugar al conflicto, el historiador Sebastian Haffner encuentra otras causas remotas de la Primera Guerra Mundial más afines al campo de la psicología, la sociología, la política y la diplomacia alemanas del periodo previo.

Partiendo de la responsabilidad indiscutible del Imperio Alemán en la provocación de la guerra analiza los “pecados capitales” cometidos por “decisiones equivocadas y medidas incorrectas por parte de unos gobiernos alemanes que, en su mayoría, contaron con la aprobación de la opinión pública”

1) “El alejamiento de Bismark”

Consciente de la imposibilidad del mantenimiento de una guerra en dos frentes simultáneos, el occidental con Francia y el oriental con Rusia, el “canciller de hierro” diseño una hábil política diplomática centrada en dos objetivos, el asilamiento de Francia, como enemigo acérrimo del Imperio Alemán y la evitación de todo enfrentamiento con el Imperio Británico.

Por un lado pactó un acuerdo con el Imperio Austro-Húngaro, con el que compartía frontera en Polonia y propició un acercamiento con el Imperio Ruso, mediante la formación de la Liga de los Tres Emperadores, pese a las rencillas ruso-austriacas en la zona de los Balcanes

Por otro lado propició la Triple Alianza entre Alemania, Austria e Italia, igualmente frágil por las tensiones existentes entre estos dos países a raíz de la unificación italiana y el conflicto en la zona de los Alpes.

El abandono de esta política de equilibrio continental interior y respeto a la hegemonía británica en el exterior, el deseo de satisfacer un ansia imperial, llevó a Alemania a desear y a provocar la guerra.

 2) “El plan Schliefen”

Según Haffner, la decisión final a favor de una guerra de Austria contra Serbia se tomó el 5 de Julio de 1914 en Potsdam. La indecisión del Gobierno Austro-Húngaro y la división de pareceres entre la beligerancia del Jefe del Estado Mayor, las vacilaciones del ministro de Asuntos Exteriores y el Emperador Francisco José y el voto contrario del Primer Ministro húngaro, les llevaron a trasladar la decisión a Alemania, que aquel momento le pareció favorable frente a la creciente y acelerada modernización e industrialización emprendida por el Imperio Ruso, especialmente su sistema ferroviario.    

El cálculo erróneo fue considerar que Inglaterra se mantendría neutral si la guerra se declaraba por mediación de Austria y frente al pequeño estado de Serbia, teniendo en cuenta la débil alianza anglo-rusa y que la zona balcánica era precisamente el punto más débil de las relaciones entre ambos países.

Este razonamiento, a posteriori, parecía adecuado pues, como declararía más tarde Churchil, ministro de Marina en aquel momento, “La mayor parte del gabinete estaba a favor de la paz. Al menos tres cuartas partes de sus miembros estaban decididos a no dejarse arrastrar hacia ningún conflicto europeo a menos que la propia Inglaterra fuere atacados, cosa que no era muy probable. Primero confiaban en que entre Austia y Serbia la sangre no llegara al ´rio; segundo, de no ser as´ñi esperaban aue Rusia no interviniese; tercero, si Rusia intervenía, confiaban en que Alemania se mantuviese al margen; cuarto, si Alemania sí que atacaba a Rusia, esperaban que al menos Francia y Alemania se neutralizaran mutuamente, sin necesidad de combate; pero si Alemania atacaba Francia, creían que al menos no lo haría a través de Bélgica y de hacerlo, al menos sin que hubiera resistencia por parte de belga…” 

Sin embargo, el único plan con que contaba el Imperio Alemán era el denominado  plan Schliefen, que contemplaba, en caso de una guerra en dos frentes, la estrategia de un movimiento defensivo o retirada en el frente del Este y una rápida derrota de Francia en el frente Oeste a través de Bélgica, dada la fortaleza defensa de la frontera francesa.

Es decir, que la única vía posible contemplada por el gobierno alemán llevaba aparejada la ruptura del equilibrio y la neutralidad inglesa y su invitación a un conflicto que, de este modo se transformó de una guerra local a una guerra mundial. 

3) «Bélgica y Polonia, o la huida de la realidad».

En el verano de 1915, Alemania había logrado una clamorosa victoria sobre la Rusia en el frente del este que le podría facilitar una salida airosa del conflicto, contra todo pronóstico, dado el estancamiento en el frente occidental –que privó de una rápida  fácil derrota francesa- y el agotamiento de sus fuerza militares frente a una intacta Inglaterra, que aún conservaba freso su contingente militar. Bien pudiera haber negociado una paz sin pérdidas que hubiera evitado la continuación de la guerra. Sin embargo, rechazó tal posibilidad, a juicio de Haffner, no siendo siquiera consciente de su existencia: Alemania llevaba tiempo a la defensiva y sin embargo seguía sintiéndose en posición de ataque, con una total pérdida del sentido de la realidad una paz sin vencedores y vencidos era considerada como una derrota.

Relata Haffner cómo en aquellos días el debate nacional en Alemania se centraba en gestionar la victoria, con fantasías sobre el reparto y administración de la costa belga el destino de Polonia como protectorado alemán o anexionarla a Austria, la incorporación de Egipto y Sudan para favorecer el acceso a Oriente Próximo y atraer al ámbito de poder alemán a  Holanda  y sin embargo, las ciudades alemanas pasaban hambre por la escasez de recursos, el ejército estaba desbordado en los frentes del Somne, en Flandes, en Rokitnoje, en Baranovichi, en Galitzia y Bucovina, en el frente austriaco,  resistiendo a duras penas y sufriendo un grave desabastecimiento.

En 1916, con la mediación del presidente americano Wilson, se pudo llegar a una paz razonable con las potencias aliadas, bajo el presupuesto de retrotraer Bélgica y Polonia a la situación previa del conflicto. El gobierno alemán rechazó esta posibilidad, ofreciendo, con notable prepotencia, unas condiciones de paz que, incomprensiblemente anulaban cualquier opción a la misma: Bélgica y Polonia resultaron innegociables cuando históricamente la política anexionista alemana nunca contó con estos países. Bélgica no fue más que un instrumento para la invasión de Francia. Polonia, por el contrario nunca se encontró bajo las aspiraciones alemanas, si acaso la parte prusiana de Polonia, pero dentro de las ambiciones territoriales de Austria. Sin embargo el 5 de noviembre se proclamó el Reino de Polonia en la Polonia rusa ocupada con lo que se anuló cualquier opción a llegar a una paz especial con el Imperio Ruso.   

4) «La guerra submarina sin cuartel».

La ceguera del gobierno alemán, que le llevó a provocar la entrada en guerra a Inglaterra, le llevó a provocar igualmente la entrada en guerra de Estados Unidos mediante la estrategia de una guerra submarina sin cuartel. El presidente Wilson ya había advertido al gobierno alemán de esta posibilidad y, sin embargo, aquel, calculando erróneamente que de este modo anularía el poderío naval británico (militar y mercante)  incorporó a un enemigo mucho más poderoso aún. Si con la entrada en guerra de Inglaterra se avocó a una derrota probable, la venida de Estados Unidos la elevó a una certeza absoluta.

5) «El juego de la revolución mundial y la bolchevización de Rusia».

La bolchevización de Rusia, según Haffner, fue consecuencia de una política consciente y muy meditada de la Alemania imperial con la que se aspiraba a la paz victoriosa en el Este y a la anulación y desmantelamiento del gran Imperio Ruso, no meramente una paz parcial que aliviaría el frente oriental, pues este objetivo pudo conseguirse con la mediación del Presidente Wilson y la renuncia a la proclamación del Reino de Polonia.

Lenin fue un visto como un peón más de la estrategia alemana de la reforma de le estructura de los Estados de Europa en un imperio Alemán, el favorecer y facilitar la revolución bolchevique como “instrumento bélico” para la desestabilización del Imperio Ruso. Así, Lenin y la revolución bolchevique fue financiada por el gobierno alemán y su éxito se debió en gran medida a esta ayuda.

6) «Brest-Litovsk o la última oportunidad desaprovechada»

En la primavera de 1918, Alemania impuso a la Rusia bolchevique la paz de Brest-Litosk con unas gravosas concesiones territoriales y políticas: Alemania había ocupado Finlandia, Livonia, Estonia, Ucrania, la región del Donets, Crimea, la península del Quersoneso, provisionalmente las regiones del Don y Kuban y había llegado al Cáucaso.

El gobierno alemán se  cegó ante el espejismo de un gran Imperio Alemán Oriental y lejos de aprovechar la oportunidad de liberar del frente oriental unos efectivos que hubieran podido alterar el resultado del frente occidental, su expansión por el Este fue la mayor de toda la guerra en su afán de consolidar los territorios esquilmados a Rusia en vez de haber negociado una paz moderada y asequible para un  adversario que, en última instancia nunca fue derrotado militarmente, y sentar las bases de una futura relación más armónica y estable.

7) “La verdadera puñalada”

En abril de 1918 la derrota alemana ya era clara. Estados unidos había entrado en guerra y las fuerza alemanas estaban exhaustas e imposibilitadas de hacer mella en el frente inglés y francés cuando debían enfrentarse ahora a un ejército nuevo, fresco y bien equipado. Por otro lado, los aliados alemanes estaban igualmente al límite de sus fuerzas y cercanos a la rendición.

Y sin embargo el ejército alemán permanecía invicto con posibilidades de efectuar una retirada estratégica del frente francés y belga y adentrándose en sus propias fronteras, incluso con la renuncia a Alsacia y Lorena, diseñar una operación estrictamente defensiva que motivase, aún, a las potencias aliadas a aceptar negociar una paz equilibrada.

Conocida esta situación no fue asumida en absoluto y por una grave carencia psicológica que impidió reconocer la realidad se exigió a los alemanes que continuasen luchando. Según Haffner, la derrota alemana de 1918 se produjo en tres fases. Una fase de abril a mediados de junio de las omisiones imperdonables, en la que ninguno de los contendientes supo que había llegado el final; una segunda fase de desde mediados de julio hasta mediados de septiembre, de la derrota militar y el derrumbe de los aliados alemanes en la que Alemania persistió en retener Bélgica y el norte de Francia como “prenda”; y la tercera fase del 29 de septiembre, de la derrota incontrolable, en la que el mando del Ejercito obligó al gobierno imperial a firmar un alto el fuego sin preparación ni negociación previa.

El desarrollo de estos acontecimientos en noviembre de 1918, depositó en manos de socialdemócratas, liberales y católicos, según Haffner, la responsabilidad de asumir la derrota y la capitulación cuando nunca antes tuvieron la responsabilidad en la guerra.

Adoptando una estrategia militar errónea, ofensiva en vez de defensiva, se frustró al menos el éxito táctico de una paz negociada, obteniendo una paz vergonzosa que irrumpió en la mentalidad de la sociedad alemana y le suministró el veneno del sentimiento de traición. La “puñalada” que el pueblo alemán entendió haber recibido cuando lo cierto, según Haffner, fue que la verdadera puñalada la recibió de sus propios dirigentes que le ocultaron la verdad reparadora y fomentaron el autoengaño de por vida (causa del posterior sentimiento de revancha que aprovechó Hitler, con las consecuencias conocidas).

Finaliza el texto con sendos epílogos de 1964 y 1981. El primero de ellos, en el contexto de la Guerra Fría y la política de bloques, el autor denuncia que la República Federal aún no ha abandonado la mentalidad y estado de ánimo que le llevó a la intervención en las dos guerras mundiales y que sigue cometiendo los mismos pecados denunciados en su ensayo. El segundo epílogo sirve para desdecirse de las conclusiones a las que llegó en 1964, no sobre el análisis de la Primera Guerra Mundial sino su reiteración en 1964. El autor considera que ha ocurrido un cambio generacional, un cambio de época en la historia alemana y un cambio en el pensamiento político de los alemanes: en 1970 y 1971 se firmaron los Tratados del Este con la URSS, Polonia y la RDA en virtud de los cuales admitía la inviolabilidad de las fronteras existentes y la renuncia a la reunificación y ampliación de las fronteras.

El presente libro aporta, una visión crítica de la Guerra Mundial relatada por un autor alemán que no británico, francés o soviético. Por otro lado ofrece un análisis de las causas de la guerra no desde los estrictos acontecimientos históricos que dieron lugar a ella sino desde la perspectiva de la mentalidad y psicología profunda tanto del gobernante como de la opinión pública alemana.

Aunque no lo expresa, Haffner comparte con el joven anarquista Gavrilo Princip la significación que tuvo aquel estallido inicial cuando un psiquiatra penitenciario le preguntó cómo se sentía al ser la causa desencadenante de tantas matanzas “Si no lo hubiera hecho, Alemania hubiera encontrado otra excusa”, respondió. 

Muy probablemente sin haber estudiado a Clausewitz, el joven anarquista ratificó instintivamente la concepción que de la guerra formuló el teórico el alemán en el sentido de considerarla un instrumento político. Y como tal fue utilizado, una vez más, y no la última, en este caso por el Imperio alemán de principios del siglo XX.   

Altamente recomendable, la presente obra es un libro corto, escrito en un lenguaje sencillo, casi periodístico, donde los datos puramente estadísticos, la fechas y los nombres son más esclarecedores que la mera relación farragosa de los mismos.     

Un saludo.

SEBASTIAN HAFFNER, pseudónimo de Raimund Pretzel, periodista, escritor e historiador alemán, nacido en Berlín el 27/12/1907 y fallecido en Berlín el 02/01/1999. Estudió derecho, colaboró con el periódico británico el Observer durante su exilio durante la II Guerra Mundial. Destacan sus obras “Historia de un alemán” (1939), “Alemania, Jeckyll y Hyde, el nazismo visto desde dentro” (1940), “Los siete pecados capitales del imperio alemán durante la Primera Guerra Mundial (1964),  “Winston Churchil: una biografía” (1967), “Anotaciones sobre Hitler” (1978) y “De Bismark a Hitler” (1987), “El pacto con el diablo”, “La revolución alemana de 1918-1919.

los siete pecados capitales del imperio aleman en la primera guer ra mundial-sebastian haffner-9788423338283

  • Nº de páginas: 192 págs.
  • Editorial: DESTINO
  • TRADUCCION: Beatriz Santana Lopez
  • Encuadernación: Tapa dura
  • ISBN: 9788423338283
  • Año edicón: 2006
  • Plaza de edición: BARCELONA


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«tiempos modernos» -ensayo- de paul johnson: ¿condenados a repetirla?


“La gran tentación del colonialismo, el gusano que anidaba en la manzana del mercado libre, era el deseo de realizar actividades de ingeniería social.” P.J.

Ahora que estamos a punto de iniciar el nuevo año 2014, pronto cambiará de sentido la expresión “el año 14”, aunque previsiblemente vuelva a tener el la vigencia de antaño, previsiblemente por el cercano cumplimiento del centenario de la Gran Guerra, que presagia un torrente de libros más o menos afortunados, más o menos oportunistas, sobre la Primera Guerra Mundial y el año 1914.

Ciertamente, aquel año y aquella guerra marcaron el fin de la era decimonónica y el inicio del siglo XX. Aunque cronológicamente el calendario ya había cambiado, sociológica y políticamente el salto cualitativo desde siglo anterior al nuevo siglo se produjo al final del desastre mundial.

Para el historiador Paul Johnson el mundo moderno comenzó el 2 de Marzo de 1919 con la confirmación empírica de la teoría de la relatividad formulada por Einstein, mediante la toma de fotografías simultáneas de un eclipse solar en la isla del Príncipe, frente al África Occidental, y en Sobral, Brasil, corroborando así la superación de la física newtoniana, e iniciando “un mundo relativista” en el que la banalización del término (que horrorizó al propio Einstein) dio lugar a la supremacía del relativismo moral como justificación del totalitarismo. A partir de la teoría de la relatividad se desdibujó el concepto del absoluto y, pese a la confusión entre relatividad y relativismo, el mundo moderno asimiló erróneamente que no había nada absoluto, que todo era relativo. A partir de esa concepción del mundo, éste no volvió a ser el mismo.

Puestos a elegir, sin ánimo de ser pretencioso, para mí el inicio de la época moderna, del nuevo siglo XX, pudo estar al inicio de la Gran Guerra, o la I Guerra Mundial, como se la llamó posteriormente, pasada la catastrófica experiencia, nuevamente, de la II Guerra Mundial.

Si cada época suele ser categorizada y etiquetada con un nombre, una mención definitoria de fácil asimilación y muy útil para resumir en una frase la concepción de todo un siglo, al igual que el s. XVIII fue el siglo del Racionalismo y la Ilustración; el s. XIX el de la Industrialización y el Colonialismo, el s. XX. fue el siglo de la Guerra y el Totalitarismo, aunque también de la descolonización, de las libertades individuales, o de la Era Informática.

De verdad que todo un siglo nos ofrece muchos material de análisis y estudio pero, principalmente el siglo XX se caracteriza por el carácter global de los conflictos armados: se inicia con una guerra mundial y finaliza igualmente con una guerra abierta, esta vez en el mundo subdesarrollado, pero con implicaciones internacionales. Según Wikipedia, las guerras del siglo XX fueron las siguientes: Guerras de los Bóeres (1899-1902), Guerra de los Mil Días (1899-1903), Guerra ruso-japonesa (1904-1905), Revolución mexicana (1910-1917), Guerra del Rif (1911-1927), Guerras de los Balcanes (1912-1913), Primera Guerra Mundial (1914-1918), Revolución rusa (1917-1921), Genocidio armenio en Armenia (1915-1923), Revolución de Noviembre en Alemania (1918-1919), Guerra civil china (1927-1950), Matanza de San Valentín (1929), Guerra colombo-peruana (1932-1933), Guerra del Chaco (1932-1935), Guerra Civil Española (1936-1939), Guerra peruano-ecuatoriana (1941-1942), Segunda Guerra Sino-Japonesa (1937-1945), Segunda Guerra Mundial (1939-1945), Guerra Fría (1945-1991), Guerra de Indochina (1946-1954), Primera guerra árabe-israelí (1948), Guerra de Corea (1950-1953), Guerra de Argelia (1954-1962), Primera guerra civil sudanesa (1955-1972), Guerra de Suez (1956), Guerra de Sidi Ifni (1957-1958), Revolución cubana (1956-1959), Crisis del Congo (1960-1965), Guerra civil de Guatemala (1960-1996), Conflicto armado colombiano (1964-presente), Guerra de Vietnam (1965-1975), Guerra de los Seis Días (1967), Guerra Cristera México (1926 -1929), Guerra civil nigeriana (1967-1970), Guerra de Yom Kipur (1973), Genocidio camboyano (1975 – 1979), Revolución Sandinista (1979 – 1990), Guerra civil libanesa (1975-1989), Guerra de Afganistán (1978-1992), Guerra Irán Irak (1980-1988), Guerra Civil de El Salvador (1980-1992), Conflicto armado interno en el Perú (1980-2000), Guerra de las Malvinas (1982), Segunda guerra civil sudanesa (1983-2005), Guerra del Golfo (1990-1991), Guerra Civil Argelina (1991-2002), Guerras yugoslavas (1991-2001), Guerra civil en Sierra Leona (1991-2002), Guerra de los Diez Días (1991), Guerra Croata de Independencia (1991-1995), Guerra de Bosnia (1992-1995), Guerra de Kosovo (1999), Genocidio ruandés (1994), Genocidio congoleño (1994-2002), Guerra del Cenepa (1995), Primera guerra chechena (1994-1996), Primera guerra del Congo (1996-1997), Guerra civil nepalesa (1996-2006), Segunda Guerra del Congo (1998-2003), Conflicto de Ituri (1999-2006), Guerra entre Etiopía y Eritrea (1998-2000), Segunda guerra chechena (1999-2006).

Por supuesto, Johnson no relaciona en su libro todos y cada uno de estos conflictos, ni siquiera trata sobre los logros intelectuales, artísticos o culturales del siglo (al modo de la magnífica obra del historiador Peter Watson) sino que se limita a ofrecernos un recorrido somero sobre los puntuales acontecimientos histórico-políticos del siglo; las causas de la Primera Guerra Mundial; el surgimiento del régimen bolchevique en de 1917; el desencadenante de la Segunda Guerra Mundial; la dramática posguerra y el Nuevo Orden Mundial; la Guerra Fría y el juego de las potencias vencedoras; los últimos estertores del colonialismo; el papel incoherente, ambiguo y partidario de la ONU; los orígenes del conflicto en Oriente Medio; etc. A través de sus protagonistas, sus actuaciones y decisiones, va desgranando los distintos hitos históricos.

Destaca, entre muchas de sus ideas, la importancia que otorga el autor a la voluntad individual de los distintos dirigentes políticos, lo que llama la apoteosis de la autocracia individual, en que las masas depositaron todo el poder y capacidad de decisión con ciega obediencia a sobre sus dirigentes, Lenin, Hitler, Stalin o Mao, quienes guiaron el rumbo de sus respectivos países condicionados por sus propios prejuicios, fobias y ambiciones.

Pese a las críticas recibidas por este autor, significado políticamente dentro de una orientación conservadora, este libro es un buen compendio de la historia del siglo. Con un lenguaje claro u sencillo y un análisis certero y esencial. Un saludo.

PAUL JOHNSON (fuente Wikipedia), escritor, historiador y periodista británico, nacido en 1928, estudió historia en la Universidad de Oxford. Trabajó como asistente de edición en la revista parisina “Realités” entre 1952-1955. Fue corresponsal en Francia del periódico New Statesman donde fue editor en 1970. Desde 1981 escribe una columna en la revista The Spectator y también colabora, periódicamente, con Forbes y National Review. En 2006 recibió la Presidential Medal of Freedom, el máximo galardón civil de los Estados Unidos. Su bibliografía es amplia: (1997). La búsqueda de Dios; Creadores: de Chaucer y Durero […] a Picasso y Disney; (2004). Estados Unidos: la historia; (2006). La historia de los judíos.; (2004). Historia del cristianismo. (1992). El nacimiento del mundo moderno ‘1815-1830’; (2001). El Renacimiento. (2007). Tiempos modernos.; (2008). Intelectuales.; (2009). Héroes.; (2012). Humoristas.

INDICE:
1.- Un mundo relativista
2.- Las primeras utopía distópicas
3.- Esperando a Hitler
4.- Decadencia de la legitimidad
5.- Una teocracia infernal, un caos celestial
6.- La última arcadia
7.- el derrumbe
8.- Los demonios
9.- El momento culminante de la agresión
10.- El fin de la vieja Europa
11.- El año decisivo
12.- Superpoder y genocidio
13.- La paz a través del terror
14.- La generación de Bandung
15.- Los reinos de Calibán
16.- Experimentos con la mitad de la humanidad
17.- El lázaro europeo
18.- El intento de suicidio de Estados Unidos
19.- Los años setenta, una década colectivista
20.- La recuperación de la libertad

  • Título original: A History of the Modern World
  • Traducción: Aníbal Leal
  • © 1983 Paul Johnson
  • © 2000 Ediciones B Argentina, S.A.,
  • para el sello de Javier Vergara Editor
  • ISBN: 950-15-2093-5


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«enquiridion» de epicteto, sabios consejos hurtados al paso del tiempo.


Desconociéndose el origen concreto de la filosofía, entendida como disciplina dirigida al conocimiento y explicación racional (no meramente mística o mitológica) del ser humano y su circunstancia, lo cierto es que desde muy antiguo junto con la conciencia de sí, el hombre pensante debió buscar, palpándose el cuerpo, el libro de instrucciones de uso. Y no hallándolo tuvo la osadía de desafiar al propio creador y componer por sí mismo tan ansiado instrumento con el que, al parecer, la humanidad no estaba dotada de serie.

Muchas vueltas ha dado la tierra al sol y muchos hombres han querido entregar a la posteridad su propia concepción de cómo pueda ser el recto vivir en la búsqueda del sentido y la felicidad personal, bien desde una postura estrictamente filosófica, bien desde una postura religiosa o, incluso, artística. Sin embargo más de dos mil quinientos años después del – teórico – nacimiento de la filosofía griega -es decir, occidental-, nadie como uno solo supo legarnos un pequeño manual, con unos pocos consejos muy atinados y nada alambicados, sobre como vivir una vida discreta y feliz. Me refiero a Epicteto y a su Enquiridion.

Enmarcado dentro de la doctrina de los estoicos, inmerso dentro de la corriente del materialismo filosófico -por ponerle alguna etiqueta orientativa que nos facilite ubicarlo en la biblioteca pública, este ciudadano (que no lo fue en su juventud, sino esclavo)  y de origen griego (que hoy no lo sería, sino turco), vivió (filosóficamente hablando), sin embargo, bajo los estertores de la dinastía romana Flavia y su último representante, Domiciano.

En coherencia con su pensamiento no dejó obra escrita, aunque luego fuesen transcritas sus enseñanzas por un alumno aplicado, por cuya causa podemos hoy agradecerle unas orientaciones prácticas que el tiempo no ha hecho desmerecer. Es de destacar la sencillez de su planteamiento  y su inmediata y directa aplicación a nuestra vida cotidiana.

Este no es un libro para ti si eres una persona que piensa que la vida es ya de por sí lo suficientemente complicada como para que nosotros nos la compliquemos más; que cada uno se comporta muchas veces como enemigo de sí mismo; y que la felicidad consiste en buscar la soluciones allí donde existen y no donde queremos encontrarlas; básicamente porque no lo necesitas. Por si acaso, si alguna vez pierdes el rumbo ojéalo un poco que son unas pocas páginas.

Qué mejor reseña que una selección de su pensamiento, he extractado unas pocas frases utilizando la traducción de Denes Martos (http://www.laeditorialvirtual.com.ar):

 

 

5. No son las cosas las que atormenta a los hombres sino los principios y las opiniones que los hombres se forman acerca de ellas.

 

8. No exijas que las cosas sucedan tal como lo deseas. Procura desearlas tal como suceden y todo ocurrirá según tus deseos.

 

30. Los deberes se miden universalmente por relaciones. ¿Alguien es un padre? Si lo es, esto implica que los hijos deberán en algún momento cuidar de él, deberán obedecerle en todo, escuchar pacientemente sus reconvenciones, sus correcciones. ¿Me dirás que es un mal padre? ¿Quién te dijo que la Naturaleza, cuando te dio un padre, se obligó a dártelo bueno?

 

Y esto no se refiere tan sólo a tu padre. ¿Es injusto tu hermano? Pues mantén tu situación respecto de él. No consideres lo que él hace sino lo que haces tú para mantener tu libre albedrío en un estado conforme a la Naturaleza. Nadie puede herirte si tú no lo consientes. Sólo te lastimarán si crees que has sido lastimado. De esta forma, por lo tanto, aplicando la idea a un vecino, a un ciudadano o a un general, podrás establecer los deberes correspondientes si te acostumbras a considerar las diferentes relaciones.

 

Si te comentan que alguien ha hablado mal de ti, no te tomes el trabajo de negar lo que ha dicho. Responde simplemente: “Es que no conoce mis otros defectos. De conocerlos, hubiera hablado mucho más y peor.”

 

35. Cuando hagas algo que, según tu mejor criterio, debe ser hecho, nunca tengas vergüenza de que te vean haciéndolo, aun cuando todo el mundo pueda formarse una idea equivocada de lo que haces. Porque, si no has de obrar rectamente, desiste de la acción misma; pero si tu obrar es recto, ¿por qué habrías de temer a quienes te juzgan en forma equivocada?

 

Un saludo. 

enquiridion-9788497164061

  • Nº de páginas: 142 págs.
  • Encuadernación: Tapa dura
  • Editoral: JOSE J. DE OLAÑETA
  • ISBN: 9788497164061


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«el fantasma del rey leopoldo» de adam hochschild; cuando la maldad y codicia desangran un territorio sometido a la más horrenda, criminal y sistemática explotación.


«La creencia en una fuente sobrenatural del mal no es necesaria; el hombre por si mismo es muy capaz de cualquier maldad.» Joseph Conrad de «El corazón de las tinieblas»

En el centro de la ciudad de Bruselas, cercano a los edificios de la Unión Europea, se alza imponente el complejo monumental del Cincuentenario como expresión arquitectónica de la gloria y esplendor de Bélgica durante el corto periodo de 50 años de trayectoria como estado autónomo e independiente de los Paises Bajos. En esa misma ciudad se encuentra el impresionante Palais Royal, cuya configuración actual es producto de una espectacular remodelación y ampliación llevada a cabo bajo las órdenes del mismo rey Leopoldo II, como símbolo de la riqueza y fastuosidad del poder real. Toda la ciudad presenta muestras de reconocimiento hacia un monarca que legó a su pueblo monumentos y obras faraónicas financiadas con el marfil y el caucho provenientes de la lejana e ignota región africana del rio Congo.

Pocos ciudadanos se preguntaron entonces sobre la fuente de tales riquezas y el costo humano de las mismas. Pocos son hoy en día quienes cuestionan, al menos moralmente, el fundamento y legitimidad de dicha riqueza y, ni mucho menos, son conocedores de la cruzada emprendida por un puñado de hombres para revelar al mundo la atrocidad de la explotación colonial del Congo y poner fin a dicho infierno.

Se habla mucho de la leyenda negra del descubrimiento y colonización de America por parte de los españoles, de la esquilmación de las materias primas de aquellos territorios, que fluían como ríos de oro y plata hacia los desagües financieros de la dinastía de los Austrias. Sin embargo, sin pretender justificar aquellos hechos ni a aquellas personas, lo cierto es que el Reino de España no solamente se aprovechó de los recursos naturales y humanos de unos territorios recién descubiertos y conquistados sino que mantuvo durante siglos una especial responsabilidad hacia sus súbditos, a los que los integró en su propia organización administrativa y en su cultura, y llegó a atribuir, progresivamente, la categoría de ciudadanos.

Existen evidentes diferencias respecto de la voraz y sistemática explotación del Congo por parte del rey Leopoldo II, que si bien no fue la primera ni la última – como muy bien recoge el libro objeto de reseña al aludir a la colonia alemana de Camerun; o a los territorios franceses del Africa Ecuatoria;l o la Angola portuguesa- sí que destacó por una circunstancia excepcional: ha sido quizás el único supuesto de toda la historia en la que el dominio y administración colonial fue reivindicada por una sola persona como propietario único de dichos territorios, en lugar de por un estado nacional.

Este libro, “el fantasma del Rey Leopoldo” ofrece lo que promete su subtítulo: una historia de codicia, terror y heroísmo en el Africa colonial. Relata y sistematiza la información existente sobre la historia del Estado Libre del Congo, sus antecedentes, su formación, su administración, el régimen esclavista al que fue sometida su población y las maniobras políticas y mediáticas de su propietario frente a la campaña de denuncia del grupo de idealistas que consiguieron, finalmente, poner fin a la propiedad del rey Leopoldo y su forzar su cesión al estado belga, aunque no llegaron a mitigar la existencia miserable de sus habitantes.

El autor nos retrata al rey Leopoldo II en su faceta pública, desde su ascensión al trono en 1865 hasta su muerte en 1909, la cual fue hábilmente trabajada y maquillada por el Rey, ofreciendo una imagen de hombre de estado conciliador, altruista y filántropo, inspirado por los valores de la compasión y el progreso, que azuzó a la comunidad internacional para liberar a las tribus negras del África ecuatorial de la lacra de la esclavitud, ejercida fundamentalmente por los mercaderes esclavistas “árabes” que cíclicamente asolaban la región y diezmaban aldeas y poblados destinando al comercio de personas. Igualmente nos pinta al rey en su faceta privada, bajo el yugo de un matrimonio infeliz, concertado políticamente, y un total despego hacia sus tres hijas a las que pretendió, hasta el último momento, arrebatar el legítimo derecho a una herencia holgada producto de los negocios de su padre. Nos presenta también al rey Leopoldo como un hábil e inteligente intrigante político y un taimado empresario  que supo urdir una trama de sociedades y asociaciones internacionales con las que enmascarar sus turbios intereses económicos en la región africana del Congo bajo el disfraz de la ayuda humanitaria y la promoción del comercio, el progreso y la civilización.

En efecto, en 1876 el Rey Leopoldo organiza la Conferencia Geográfica de Bruselas, a la que invitó a los principales geógrafos y exploradores de Europa, activistas humanitarios como el Presidente de la Sociedad Antiesclavista Británica, al Presidente de la Sociedad Misionera de la Iglesia, a directivos empresariales, a militares de la Royal Navy que habían intervenido en misiones antiesclavistas en el Indico, y a todos ellos los implicó en un proyecto internacional para “abrir la civilización” a las zonas oscuras de Africa y promover la exploración de regiones aún ignotas. Con su iniciativa se creó la Asociación Internacional Africana, formada por distintos comités nacionales en los países intervinientes, la cual poco a poco fue perdiendo el impulso original, volviéndose prácticamente inoperativa, si bien Leopoldo supo aprovechar su imagen internacional y la legitimidad de sus orígenes para sustituirla por la casi homónima Asociación Internacional del Congo creada en 1879.

Previamente, en 1878, había conseguido atraer a su causa al afamado explorador Henry Morton Stanley, junto con el cual pergeño una estrategia para la creación de una “confederación de repúblicas negras libres” mediante la firma de tratados con los jefes africanos, en virtud de los cuales conferían a la Asociación Internacional del Congo toda la soberanía política de sus territorios así como derechos ilimitados de explotación de recursos en régimen de monopolio.

Faltaba el reconocimiento internacional, que llegó con la Conferencia de Berlín de 1885 convocada por Bismark, a instancias de Leopoldo, que supo mantenerse al margen aun cuando su figura estuvo siempre presente en las deliberaciones y ponencias. Acudieron a la misma todas las potencias coloniales y países con intereses en la región. A raíz de la misma, Leopoldo consiguió mediante sutiles y hábiles maniobras políticas, jugando con los intereses contrapuestos de Reino Unido, Francia y Portugal y la promesa de la apertura al libre comercio internacional, el reconocimiento pleno de sus derechos particulares sobre la región del Congo bajo la bandera de la Asociación Internacional del Congo. El 29 de Mayo de 1885 el rey promulgó un decreto por el que denominó al nuevo país Estado Independiente del Congo del que se proclamó rey soberano con la aprobación del Parlamento belga.

Dividido administrativamente en una zona de libre comercio (administrada por empresas concesionarias del Estado en régimen de monopolio temporal) y una zona de dominio privado (administrada por los propios funcionarios del Estado), posteriormente se creó una tercera zona de dominio de la Corona (cuyos beneficios se reservaba, con carácter privado y  en exclusiva el propio monarca. Primero el marfil y luego el caucho, el régimen de explotación que establecía cupos obligatorios a los pobladores e incentivos a los miembros de la Fuerza Publica trajo como consecuencia la esclavitud y represión de los pobladores, a los que se torturaba o sometía mediante la coacción en la persona de sus esposas o hijos, que a menudo eran tomados como rehenes.

Las cifras son aterradoras, la investigación por testimonio de los misioneros, por los diarios personales de miembros de la Fuerza Pública, por la contabilidad de las armas y cartuchos consumidos, las estadísticas poblacionales arrojan un descenso de población de en torno a diez millones de personas. Asesinatos directos, razzias de castigo, amputaciones de manos como prueba de las contabilidad de las muertes, hambrunas agotamiento y abandono de gran cantidad de población a la que se les privada de sus labores de cultivo, trayendo la escasez y carestía.

Con las primeras denuncias del historiador americano George Washinton William, y la labor del periodista Morel y el entonces cónsul británico en el Congo, Roger Casement, que supieron implicar a la comunidad internacional, se fue haciendo evidente que la magnitud del horror congoleño. Finalmente el Rey Leopoldo fue incapaz de acallar las críticas constantes con los métodos de presión y desprestigio de las voces críticas  que hasta ese momento le habían funcionado y negoció la cesión del dominio sobre el Estado Libre del Congo a favor del Estado belga. Realizó un negocio estupendo pues consiguió la asunción por parte de Belgica de la deuda del Estado del Congo de 110 millones de francos, la subvención de los proyectos de construcción promovidos en Bélgica por valor de 45.5 millones de francos y un pago a su favor de 50 millones de francos. En noviembre de 1908 se consumó la cesión . 

Cuenta Gustave Stinglhamber, secretario personal del Rey que cuando acude en Agosto de 1908 a las oficinas del Estado Libre del Congo, ubicadas en un edificio trasero de las instalaciones del Palacio Real, se sorprendió de encontrar la calefacción encendida; preguntando al portero del edificio, éste le comenta que «estamos quemando los archivos del Estado». Estuvieron ardiendo durante 8 días. «Les voy a dar mi Congo, dijo el Rey, pero no tienen derecho a saber que he hecho allí».

LOS PROTAGONISTAS:

George Washington Williams, misionero americano, de raza negra, nacido en 1849 y fallecido en 1891, fue la primera persona que denunció la situación de la población del Congo bajo el régimen esclavista del rey belga Leopoldo II. Escribió una » Carta abierta a Su Serena Majestad Leopoldo II, Rey de los Belgas y Soberano del Estado Independiente del Congo» que luego repitió al presidente Harrison, de Estados Unidos, «Un informe sobre el Estado y el País del Congo para el presidente de la República de los Estados Unidos de América»,  donde denunciaba los hechos y instó a la comunidad internacional a investigar los. tuvo la desgracia de fallecer al poco de su visita al Congo en el barco de regreso da Estados Unidos.

Roger Casement, diplomático británico, de origen irlandes,  nacido cerca de Dublín, el 1 de septiembre de 1864 y fallecido en Londres, el 3 de agosto de 1916, ejecutado en la horca por sus actividades en favor del independentismo irlandes. En su misión diplomática como cónsul británico en el Congo, redactó un informe para el Foreing Office que desataron las críticas internacionales contra el régimen explotador del Estado Libre del Congo. Fue íntimo amigo de Joseph Conrad y colaboró con E D Morel en la denuncia de aquel régimen genocida creando ambos en 1904 la Asociación para la Reforma del Congo para difundir los hechos denunciados y presionar a las instancias internacionales y a los ciudadanos europeos para que incitaran el cambio de la situación.

Edmund Dene Morel, escritor y periodista británico de origen frances, nacido en 1873 y fallecido en 1924. Desde su puesto de trabajo en la delegación de Amberes de la empresa naviera Elder Dempster, la cual tenía la exclusiva del tráfico mercantil con el Congo, se percató de la falsedad de las cifras oficiales respecto de los datos que él mismo contabilizaba, llegando a la deducción de que dicha desfase comercial únicamente se sustentaba en un estado esclavista. Abandonó su trabajo y se dedicó en exclusiva a la denuncia de estos hechos y al activismo militante a traves de la Asociación para la Reforma del Congo.

BIBLIOGRAFIA. ENSAYOS:

Adam Hochschild, es un escritor norteamericano nacido en 1942. Ha escrito otro libro sobre el movimiento antiesclavista del Imperio Británico titulado Enterrad las Cadenas Ediciones Península, 2006. El presente ensayo ganó el premio Duff Cooper en Inglaterra y fue finalista en el del National Book Critics Circle de Estados Unidos.

Peter Forbath,  (1931′-1998) periodista norteamericano, historiador y novelista . Fue corresponsal de la revista Time y trabajó destinado en Africa (fue expulsado de Uganda por informar sobre el aprovisionamiento de armas a la guerrilla congoleña) Europa (en la crisis checoslovaca) y Oriente (intervino como informador en la Guerra de los Seis Dias) . Autor de la novela “Congo Luso” y el libro de ensayo «Rio Congo», reseñado en este blog.

BIBLIOGRAFIA, NOVELA:

Joseph Conrad, escritor polaco, nacido en Berdyczów, actual Ucrania, el 3 de diciembre de 1857 y fallecido en Bishopsbourne, Inglaterra, el 3 de agosto de 1924). Considerado como uno de los mejores novelistas en lengua inglesa, que fue su lengua literaria. Destaca en su obra una fuerte influencia autobiografica, sobre todo por sus experiencias en la marina mercante.

Su obra más famosa quizás sea El corazón de las tinieblas sobre su experiencia, novelada, en el Rio Congo durante la explotación del Estado Libre del Congo por parte del monarca belga Leopoldo II. Argumenta con perspicacia el autor Adam Hochschild que la mala conciencia occidental y quizás la voluntad inconsciente de rechazar los hechos ocurridos ha llevado a interpretar y a analizar esta novela desde una perspectiva distorsionada, más como un análisis psicológico de la degradación humana, o bajo una perspectiva filosófica, antropológica o mitológica, desde el pos-modernismo  el pos-colonialismo y el pos-estructuralismo, que desde un punto de vista estrictamente histórico, haciendo oídos sordos a los hechos reales que relata: el Congo del Rey Leopoldo de 1890.

Mario Vargas Llosa, escritor peruano nacionalizado español, publicó en 2010, justo después de la concesión del Premio Nobel de Literatura, la novela «el sueño del celta», donde relata en clave de ficción la vida y obra de Roger de Casement. Aun cuando su calidad literaria no está a la altura de otras obras maestras del autor, a los efectos que nos ocupan esta novela se sujeta fielmente a los hechos históricos y es un buen instrumento para conocer la labor de Roger de Casement en defensa de los derechos humanos antes de su promulgación internacional y en defensa de la independencia y autonomía de los pueblos respecto de sus metrópolis coloniales.

Un saludo

  • Editor: Ediciones Península (19 de octubre de 2007)
  • Colección: Gran Atalaya (peninsula)
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 848307799X
  • ISBN-13: 978-8483077993
  • Traductor: José Luis Gil Aristu


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«el primer naufragio» (ensayo) de pedro j. ramirez: cuando la libertad y la igualdad van de la mano de la muerte, se empañan los principios e impera el terror


«Así, de crímenes en amnistía y de amnistía en crímenes, un gran número de ciudadanos han llegado a confundir las conspiraciones sediciosas con la gran insurrección de la libertad» P.J.R.

El lema revolucionario “libertad, igualdad o muerte” siempre significará muerte porque la libertad y la igualdad son frágiles y el proceso para su consecución es lento y trabajoso, siempre sujeto a zozobra y de obligada y permanente vigilancia; por el contrario la muerte es un camino fácil, expeditivo y definitivo que encierra en sí mismo la trampa y la falacia, porque nunca se ofrece la alternativa a quienes optan por los principios y valores universales sino que siempre son otros quienes eligen muerte para los demás.

La Declaración Universal de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789 estableció con firmeza y solemnidad los derechos individuales y políticos del hombre, con carácter universal e inalienable. Instituyó la Libertad, la Propiedad, la Seguridad y la Resistencia a la opresión como derechos naturales del hombre y se constituyó en paradigma y basamento de todas las formulaciones políticas posteriores cuyo fin fuera la independencia, la libertad, y la democracia:

“I. Los hombres nacen y permanecen libres e iguales en cuanto a sus derechos. Las distinciones civiles sólo podrán fundarse en la utilidad pública.

II. La finalidad de toda asociación política es la conservación de los derechos naturales e imprescriptibles del hombre. Esos derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión.”

Y sin embargo, asociamos indefectiblemente a dicho acontecimiento un concreto periodo histórico conocido con el descriptivo nombre de “El Terror” -y por el “instrumento político” de la guillotina- que trajo consigo un golpe de estado dirigido al derrocamiento del primer gobierno elegido por sufragio universal masculino de la historia, anegando en sangre y cáos los logros iniciales de la Revolución Francesa.

“El primer naufragio” de Pedro J. Ramirez relata a modo de crónica periodística este concreto episodio de la Revolución Francesa que abarca temporalmente, de Enero a Mayo de 1793 y durante el cual, la facción jacobina, aliada con los “sans-culottes” conspiró y maniobró en el seno de la Convención para exterminar a los representantes políticos moderados y asumir el control absoluto y totalitario del naciente régimen proto-democrático.

Asamblea Nacional, Asamblea Constituyente, Asamblea Legislativa, Convención Nacional, Directorio, Consulado y, finalmente, el Imperio, de 1789 a 1799, diez años que marcaron el fin de la Edad Moderna y el inicio de la Edad Contemporánea. Según la corriente mayoritaria de historiadores, cronológicamente la Revolución Francesa se inicia con la apertura de los Estados Generales en mayo de 1789, convocados por el rey Luis XVI y la constitución de la Asamblea Nacional por parte del Tercer Estado; arranca un proceso constituyente que culmina en Septiembre de 1791 con la instauración de un régimen de monarquía constitucional y una Asamblea legislativa elegida mediante sufragio censitario. La conspiración de la Corona con las monarquía austriaca y prusiana provoca una “jornada revolucionaria”  el 10 de Agosto de 1792 cuando se constituye la Comuna de Paris, destituyéndose al Rey Luis XVI, aboliéndose la monarquía y proclamándose la Primera República por la Convención Nacional con fecha 21 de Septiembre de 1792. El 21 de Enero de 1793 Luis XVI sufre la experiencia inolvidable –e irrepetible- de ver separada del cuerpo su cabeza y a partir de ahí los acontecimientos se precipitan. Con la derrota del ejército francés por los austriacos, se crea el 10 de marzo un Tribunal Revolucionario para enjuiciar de modo inapelable crímenes políticos y contra la revolución; así mismo, en abril se crea el Comité de Salud Pública con capacidad ejecutiva, a raíz de la traición del general Doumoriez. A finales de mayo se produce un golpe de estado por parte de los Jacobinos con la connivencia de los sans-culottes. En Junio se promulga la Constitución Republicana basada en el sufragio universal. El filo de la guillotina parece no mellarse con su uso continuado: en octubre de 1793 es ejecutada Maria Antonieta y poco después los girondinos; en Marzo de 1794 son ejecutados los Herbetista; en Abril de 1794 son ejecutados los Dantonistas; en Julio se produce el golpe de estado de Thermidor y Robespierre es ejecutado.

Muchos son los aspectos favorables que destacan en la presente obra. Alguno derivado de la condición de periodista de su autor, director del periódico El Mundo, en tanto que el relato de los avatares y vicisitudes de este concreto periodo histórico de Enero a Mayo de 1793 son tratados con el rigor y profesionalidad de una crónica periodística que, huyendo de la mera novelación de los hechos históricos, pero sin renunciar a una prosa amena y facil, narra cronológicamente tales hechos y los ubica en su contexto histórico apoyado en las numerosas fuentes primarias consultadas y referenciadas, interpolados de atinados comentarios del autor.

En efecto, se advierte una intención de rigor, exhaustividad y minuciosidad expresada en las 150 páginas de anotaciones y referencias y las 25 páginas de la nota bibliográfica, sobre un texto de unas 1000 páginas que incluye aproximadamente otras 20 ilustradas con grabados y retratos contemporáneos de todos los protagonistas del periodo; elemento gráfico que nos permite rastrear en los rostros de papel couché el perfil caracterológico y las motivaciones de la conducta de cada uno de esos protagonistas. Estos dos elementos, anotaciones y nota bibliográfica dota a todo el libro de una fuerte dosis de verosimilitud al contrastar su autor las “fuentes periodísticas”.

El único inconveniente de la obra puede ser su notable extensión, que a veces puede pesar al lector en momentos en que los hechos narrados, centrado el autor en la crónica de los debates e incidencias dentro del seno de la Convención,  pierden interés por su excesivo detalle. Sin embargo también su valor historiográfico radica precisamente en su puntillismo y prolijidad.

No pueden ser ajenas a la presente obra las connotaciones políticas anejas al autor, comúnmente encasillado en la derecha política -moderado o liberal, supongo yo que diría él. Sin embargo, a mi juicio, este libro no rezuma ni destila pestíferos efluvios facciosos sino una acertada descripción del radicalismo y la intolerancia política en el seno de la primera institución con pretensiones democráticas de nuestra historia, personificada, precisamente, en aquellos personajes históricos que preconizaron la libertad, la igualdad y la libertad de expresión y pensamiento y, sin embargo, se mostraron terriblemente eficaces en el exterminio y eliminación física de sus adversarios políticos. La lección histórica que pudimos haber extraído de estos hechos no sirvió en posteriores etapas históricas como la Revolución Rusa o como nuestra II República, donde la moderación política careció de firmeza frente a los extremismos y fueron arrasados por la avalancha radical sirviendo la población inocente y anónima de simiente para un oscuro periodo totalitario.

En resumen, recomiendo fervientemente este libro.

Pedro J. Ramírez, de segundo apellido –superfluo- Codina nació en Logroño en el año 1952. Periodista conocido por ser director de El Mundo, habiendo trabajado en ABC (1975 a 1980) y fue director de Diario 16 (1980).   Su producción bibliográfica es la siguiente: Así se ganaron las elecciones. (1979), Prensa y libertad. (1980), Todo un rey. (1981) (en colaboración con los periodistas Pilar Cernuda, José Oneto y Ramón Pi),  El año que murió Franco. (1985), La rosa y el capullo: cara y cruz del felipismo. (1989), El mundo en mis manos. (1991), España sin proyecto: la década felipista. (1993), David contra Goliat: jaque mate al felipismo. (1995), Amarga victoria: la crónica oculta del histórico triunfo de Aznar sobre González. (2000), El desquite: los años de Aznar (1996-2000), Mis 100 mejores cartas del director: 25 años en la vida de España (1980-2005), El primer naufragio. (2011) ISBN 978-84-9970-080-9

Un saludo

INDICE
La Revolución Francesa en treinta acontecimientos
Preámbulo. El tocsin. 31 de mayo de 1793
Capítulo I. Sangre de enero
Capítulo II. Pillaje en febrero
Capítulo III. Ensayo general en marzo
Capítulo IV Girondinos desde abril
Capítulo V. Las furias de mayo
Capítulo VI. Viernes, sábado y domingo
Notas
Nota bibliográfica
Índice onomástico

EL PRIMER NAUFRAGIO

  • editorial: LA ESFERA DE LOS LIBROS
  •  año de edición: 2011
  •  páginas: 1500
  • isbn: 978-84-9970-080-9


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«rebelarse vende» de Andrew Potter y Joseph Heath; la contrracultura, un desafío fallido.


“Simplemente no han entendido la verdadera naturaleza de la sociedad de consumo. Identifican consumismo con conformismo. Por eso no se dan cuenta de que es la rebeldía y no el conformismo lo que controla el funcionamiento del mercado desde hace décadas”  A.P y J.H

En el seno de toda cultura subyacen tensiones y distorsiones provocadas por corrientes divergentes representativas del sentir de grupos individuales que pugnan por oponerse a la asimilación del criterio mayoritariamente aceptado, son las subculturas que, aunque voces discordantes, se integran dentro del sentir y pensar general y ayudan a su progreso y crecimiento. Las llamamos contraculturas cuando su razón de ser es la oposición frontal a la cultura dominante, cuyos postulados rechazan abiertamente, aspirando a su extinción y sustitución. Siguiendo a Britto García (“El imperio contracultural”) el proceso adaptativo de la cultura adopta tres estilos, evolución cuando responde al cambio y acepta la modificación de un modo inocuo y rápido; revolución, cuando la cultura no percibe oportunamente los nuevos desafíos y su respuesta es traumática y tardía, arrasando instituciones e ideologías ya obsoletas; y decadencia cuando se falsean los mecanismos de prevención y respuesta frente a los ataques de las subculturas y contraculturas y se colapsa su sistema inmunitario cerrando la posibilidad de cualquier cambio o adaptación, lo que conlleva a su propia extinción.

Bajo un título nada ambiguo, el presente ensayo parte de la tesis de que la contracultura (referido al movimiento americano de los años 60) comparte los mismos valores ideológicos que el sistema capitalista; de que, si bien la contracultura implica un enfrentamiento con los sectores más conservadores de la sociedad, dicho enfrentamiento no es más que un intento de alteración de las pautas del  consumo  conformista y masificado y su sustitución por otro tipo de consumo inconformista y rebelde –pero consumo al fin y al cabo-; de que el yuppie de los 80 es la conversión natural del hippie de los 60.

Los autores del ensayo afirman que, lejos de haber conseguido sus objetivos, la destrucción del sistema capitalista, la contracultura surge como un revulsivo que lo aleja de la inercia de estancamiento y reactiva su expansión hacia la espiral consumista que vivimos hoy en día.  Inmersa en el proceso adaptativo antes señalado, la sociedad de consumo ha sabido fagocitar un movimiento contracultura que si bien nace con un bagaje ideológico eminentemente rupturista, la errónea concepción del diagnostico de los mecanismos sociológicos de la sociedad de masas les lleva a conclusiones equivocadas y a actuaciones abiertamente contrarias a sus pretensiones iniciales.

Según los ideólogos del movimiento contracultural analizados (principalmente la obra de Guy Deborg y su libro “la sociedad del espectáculo”) se concibe la sociedad capitalista como una ilusión efímera que carece de fundamento en la realidad; la esencia del individuo como persona humana, es transformada por medio de la propaganda y la publicidad en un producto fungible e intercambiable, un sujeto que pasa a convertirse en objeto y es una mercancía más del comercio capitalista. La ideología capitalista se sustenta en un conjunto de símbolos y representaciones que conforman el “espectáculo” de la realidad y la cultura dominante no es más que un trasunto de dicha ideología. El individuo se encuentra reprimido y es preciso realizar un acto transgresor que rompa esas barreras, le libere y le conecte con su verdad esencial. Siguiendo este razonamiento el movimiento contracultural en su oposición al sistema aboga por un rechazo total de la cultura que exige un cambio de la mentalidad del individuo y que conlleva a primar la política cultural sobre, por ejemplo, la búsqueda de la justicia distributiva, con lo que yerra en la elección de estrategias de reforma y cambio radical.

Para A. Poter y J. Heath el error del movimiento contracultural consistió básicamente en desconocer que “no existe un sistema único, integral, que lo abarque todo” que la cultura y el sistema no existen como hechos aislados sino que existen millones de personas con sus propias concepciones éticas y morales que forman parte de numerosas y muy diversas instituciones que se agrupan provisionalmente y cooperan entre sí para la satisfacción de objetivos comunes y que la rebeldía cultural es inútil y contraproducente: el fomento del hedonismo y la búsqueda del placer como mecanismo para superar la represión del individuo alienado y sometido bajo el sistema capitalista consolidó aún más el propio régimen dado que las ansias de cambio radical nutren la espiral de consumo basada en una constante innovación y sustitución.

La solución, según los autores, pasa por la participación activa en el proceso democrático de ejercicio de opinión, debate y propuestas de cambios legislativos que han venido dando lugar al presente estado de bienestar social, más que en autoexcluirse del sistema por medio de meros golpes de efecto radical contra las normas sociales convencionales en la idea, equivocada, de que la violación de las costumbres tiene una carga denotativa de carácter político siendo en realidad una intento de subversión superficial de las reglas de protocolo y urbanidad.

El ensayo se estructura en un dos partes, divididas a su vez en capítulos, en las que la primera va desgranando los fundamentos de su tesis y en la segunda va ejemplificando su argumentación. El estilo es directo, y de lectura ligera y fácil. Cuenta además con el atractivo de ilustrar sus argumentos con el análisis de películas sobradamente conocidas, como “American Beauty”, “The Matrix”, “El club de la lucha” así como novelas o libros igualmente de amplia divulgación como “Corre Conejo” –John Updike- o “No Logo” –Naomi Klein- que aproximan al lector a una realidad que puede reconocer y, por lo tanto, le permite seguir fácilmente la argumentación expuesta.

Sin desmerecer el esfuerzo interpretativo de nuestra sociedad de masas que han realizados los autores del ensayo y la  redacción clara, legible y accesible de su trabajo entiendo que éste carece, sin embargo de una amplia visión global del fenómeno contracultural en el contexto de la crisis de la modernidad occidental y su superación por la corriente filosófica, ideológica y cultural denominada postmodernismo. En efecto, esta obra se ciñe en su análisis, al ámbito geográfico o territorial del movimiento contracultural americano de los años 60, con el antecedente beatnik de los 50 y la eclosión libertaria de mayo del 68.

Igualmente, además de esta visión demasiado localista, demasiado americana, aborda de un modo muy sucinto la definición conceptual del movimiento contracultural, la génesis de sus postulados ideológicos, sus mecanismos de implantación, y el contenido de sus propuestas rupturistas en el ámbito, por ejemplo, de la antipsiquiatría, la orgía psicodélica, la extravagancia de cultos marginales, la revolución sexual, el feminismo radical, el movimiento homosexual, el ecologismo, el pacifismo militante, la integración racial y el imperialismo de la moda.

Aunque no es objeto del ensayo también observo una falta de mención hacia dos logros esenciales de la contracultura de los que nos beneficiamos hoy en día, como cultura y sociedad, y que los autores apenas señalan. Pese al evidente fracaso del movimiento contracultural en revertir la sociedad capitalista, supuso un renacimiento cultural en la literatura, música, pintura y arquitectura, un revulsivo en las artes que abrió nuevos caminos y nuevas formas de expresión totalmente enriquecedoras. Igualmente, entiendo que el movimiento contracultural nos aportó una actitud crítica frente a los errores de la sociedad capitalista, el consumismo, la contaminación medioambiental, en suma, nos legó una actitud crítica frente a los valores estereotipados del sistema imperante.

El acierto de este trabajo, a mi juicio, consiste en un brillante análisis del consumismo competitivo y la definición del concepto de “bienes posicionales”, esto es, todos aquellos bienes de consumo cuyo valor intrínseco de utilidad o funcionalidad es relegado por su propietario, el consumidor, en favor del estatus o prestigio social que le confiere su pertenencia por comparación con el resto de consumidores a los que está vedada su adquisición por tener un nivel adquisitivo o social inferior. Esta distorsión genera una sociedad permanentemente insatisfecha cuyos esfuerzos se difuminan orientan en direcciones equivocadas y se sustentan en valores personales, a mi juicio, inconsistenes que lejos de promocionar al individuo, le debilitan y cosifican. 

Ambos autores son canadienses, Joseph Heath, es Profesor de filosofía en la Universidad de Toronto; es autor de los libros “Dinero sucio”, “La sociedad eficiente: por qué Canadá está tan cerca de la utopía como es posible” y “Rebelarse vende: el negocio de la contracultura”

Andrew Potter es periodista y profesor de filosofía en las universidades de Trent y de Quebec en Montreal.

Un saludo.

 BIBLIOGRAFIA CONSULTADA

.- Racionero, Luis; Filosofías del Underground.

 .- Savater, Fernando; Heterodoxias y contracultura.

.- Britto García, Luis; “El imperio contracultural: del rock al potmodernismo”

BIBLIOGRAFIA SUGERIDA

.- Baudrillard, Jean; “El crimen perfecto”

.- Debord, Guy; “La sociedad del espectáculo”

.- Frank, Thomas; “La conquista de lo cool” 

INDICE
INTRODUCCION
PRIMERA PARTE
1.- EL NACIMIENTO DE LA CONTRACULTURA
2.- FREUD EN CALIFORNIA
3.- SER NORMAL
4.- ME ODIO A MI MISMO Y QUIERO COMPRAR
5.-  LA REBELDIA RADICAL
SEGUNDA PARTE
6.- UNIFORMES Y UNIFORMIDAD
7.- CUANDO EL TREPA QUIERE SER COOL
8.- COCACOLONIZACION
9.- GRACIAS, INDIA
10.- CONCLUSION

 

FICHA TÉCNICA
Título: Rebelarse vende: El negocio de la contracultura
Autor: Andrew Potter Joseph Heath
Traducción: Gabriela Bustelo
Colección: Taurus Pensamiento
Páginas: 424
Publicación: 11/05/2005
ISBN: 9788430605866
EAN: 9788430605866


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«malditos, heterodoxos y alucinados» de javier memba: catálogo de perdición, exaltación del genio creativo.


cropped-2012_feliz-navidad.jpg«De los 74 años vividos por el divino marqués, treinta de ellos se consumieron en la cárcel. La mayor parte de sus obras fueron prohibidas por la censura de todos los países hasta el siglo XX. Antes de que se permitiera su libre circulación, Donatien-Alphonse-François de Sade había sido reivindicado por cuantos autores y artistas que se han rebelado contra los valores y las obligaciones de la sociedad burguesa. Desde los poetas malditos hasta los surrealistas, desde Nietzsche a Sartre, pocos autores han ejercido una influencia tan grande en la heterodoxia de los últimos dos siglos como el marqués». JM

El escritor y periodista madrileño Javier Memba (Madrid, 1959), especialista cinéfilo e igualmente guionista de cine, televisión y radio, ha colaborado durante largo tiempo con el diario El Mundo en una serie de artículos a modo de reseñas biográficas de una serie de autores de la historia de la literatura occidental titulados genéricamente «Malditos, heterodoxos y alucinados», correcta expresión que define perfectamente a todos esos personajes cuyas peripecias personales pudieron trascender a su propia obra cumpliendo una vez más el dicho sobre que la realidad supera a la ficción.

Todo genio, todo creador, es un ser excepcional cuyas capacidades le hacen destacar sobre el resto de personas que, normalmente, solo compartimos nuestra común condición de bípedos implumes. Sin embargo su singularidad, o a causa de ella, les convierte en seres inadaptados, torturados, malditos y alucinados. 

Con la erudición suficiente, adecuada al medio para el que fueron concebidos dichos artículos, Javier Memba ha ido desgranando diariamente anécdotas de nuestros autores más estrafalarios, como frutos amargos del árbol del malditismo universal. Sin pretensiones de ser una obra profunda de crítica literaria se ha centrado en la descripción los tipos humanos, los hechos más trascendentes de su vida  literaria y las causas y circunstancias de su perdición Muy recomendable para quienes gustamos de la literatura y las cosas de la literatura, su historia y su intrahistoria.

El resto de su producción literaria lo componen «Edad de oro de la ciencia ficción» 2008; «La Hammer» 2007;  «Mi adorada Nicole y otras perversiones» 2007;  «La serie B (lo esencial de…)» 2006; «La década de oro del cine de ciencia ficción(1950-1960)»  2005; «El cine de terror de la Universal» 2004; «Hotel Savoy» 2000. Tiene un blog llamado «el insolidario» donde amplía su biografía. 

Malditos, heterodoxos y alucinadosJAVIER MEMBA


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«mirrorshades», antología, de bruce sterling: ciberpunk y postmodernidad ¿síntoma o diagnóstico?


LA POSTMODERNIDAD Y EL CIBERPUNK

Como toda antología, la selección de relatos que componen el presente libro ha sido realizada con el objeto de ofrecer al lector un compendio de los mejor y más significativo de la ciencia ficción adscrita al subgénero del “ciberpunk” y, como toda acción humana, las buenas intenciones no siempre ofrecen el resultado apetecido, sirviendo las más de las veces como adoquines del infierno, como dice el refrán castizo.

Bruce Sterling expresa en el prólogo, a modo de justificación, su voluntad de clasificar, sistematizar y definir esta corriente literaria proponiendo una selección de textos de autores que han  ido delimitando el concepto, aun cuando el pretendido carácter liminar de alguno de ellos no responde a la previa definición ofrecida.

Más que un nuevo camino en la corriente literaria de la ciencia ficción -que lo es-, yo creo que el ciberpunk es, así mismo, una manifestación del cambio que va gestándose en nuestra sociedad, a nivel individual y colectivo; la transición desde la modernidad hacia la denominada postmodernidad.

Sin dejar de admirarse de la percepción clarividente de autores como William Gibson, que nos dotó de imágenes conceptuales que ha culminando en un canon adoptado por grandes obras del cine y manga como  Ghost in the Shell (1991) o The Matrix (1999), este autor se limitó a anotar el cambio que se estaba operando, si bien distorsionado por el carácter maximalista de la ficción novelística.

En esta época que vivimos, que algunos autores etiquetan como post_postmodernidad, los relatos antologados como precursores, quizás sean vistos bajo una rigurosa mirada crítica, fuera de su contexto sociocultural y del tiempo en el que fueron gestados, con cierto aire de ingenuidad y candidez que la realidad ha conseguido superar.

A nivel social, el desarrollo tecnológico ha propiciado el inmediato acceso a una información ingente y desmesurada que nuestra propia naturaleza individual es incapaz de asimilar. La inmediatez, la saturación y el exceso ha roto los límites de la captación de conocimiento y los centros de poder (asociados a la gestión, canalización y manipulación de la información) se disuelven en un todo global anónimo e interconectado. Ya no existen fronteras porque el ámbito de influencia es planetario; han desaparecido las referencias territoriales o materiales, los organigramas horizontales o verticales. La modernidad ordenada, reglada, jerarquizada ha dado paso a una postmodernidad dispersa, desestructurada, poliédrica y anónima.

A nivel individual, igualmente se han perdido los referentes; el pensamiento débil ha sustituido a los grandes argumentos ideológicos (Ideología y Religión son tamizadas por la subjetividad) y la persona esta confusa. Los símbolos han desaparecido sustituidos por las imágenes –que se agotan en sí mismas despojadas de la cualidad de la representación.

La narrativa ciberpunk incorpora claramente un nuevo lenguaje, unos nuevos términos asociados a innovaciones tecnológicas rupturistas que proliferan e imponen su hegemonía en todos los ámbitos de la vida humana. Implica un cambio radical respecto de las relaciones interpersonales y con el propio entorno en la medida en que el ser humano ha roto las fronteras interiores (de su propio cuerpo, como extensión neuronal de sofisticados instrumentos o inteligencias no humanas) y exteriores (de un mundo caótico, devastado y moribundo).

A grandes rasgos, estos relatos nos ofrecen un mundo antiutópico y superpoblado cuyos recursos se han agotado y en el que convive una mayoría de población sujeta al control y manipulación de grandes corporaciones, de ámbito global. Los individuos sobreviven aL colapso de la sociedad a la que pertenecieron y oscilan entre el caos y la pérdida de referentes culturales e ideológicos y el sometimiento y sumisión a poderosas fuerzas económicas, difusas e invisibles. La supervivencia siempre es individual, no colectiva. El propio cuerpo es un mero contenedor de información el cual se conecta mediante implantes tecnológicos que lo mejoran y actualizan a menudo ayudado por las drogas de diseño, que son un suplemento y complemento para nuestra expansión extrasensorial.

 El continuo de Gernsback  de William_Gibson

 “Y un día, en las afueras de Bolinas, cuando estaba prepa­rándolo todo para fotografiar un ejemplo particularmente lla­mativo de la arquitectura marcial de Ming, atravesé una fina membrana, una membrana de probabilidad…”

Trata sobre las “alucinaciones” que sufre un fotógrafo profesional al realizar un encargo profesional consistente en retratar la arquitectura pop americana de los años 50-60 y que empieza a percibir sensaciones visuales de un mundo sustentado sobre una hipótesis de probabilidad alternativa.

La estructura del relato es clásica, lineal, sin innovaciones formales o temáticas; ciertamente alejado del estilo de posteriores novelas de Gibson inmersas en el estilo ciberpunk que define Sterling en su prólogo y, si acaso, construyendo, precisamente, las líneas generales del mismo.

Ojos de serpiente  de Tom_Maddox

“El Miedo tiene dos etapas. Una, pierdes el control comple­tamente. Dos, a continuación, tu yo auténtico surge, y no te gus­tará nada.”

Narra la experiencia traumática de un piloto militar al cual se le realizó una operación -mediante implantes en la base de su cerebro- para el acoplamiento neuronal con el ordenador de su puesto de combate y que tras licenciarse empieza a sufrir efectos secundarios de disociación de personalidad y sensación de pérdida de control. Se presenta voluntario en un proyecto experimental en una estación espacial en el que se le lleva a límite de su resistencia psíquica a fin de integrarse a nivel mental en un ente que comparte con otros compañeros de la estación.

Destaca en el relato la aparición de los implantes neuronales; las conexiones hombre-máquina -interfaz humana- y la integración del individuo en un ente  común superior con el que comparte información.

Rock on  de Pat_Cadigan

“Sintetizador. Sintecador. Pecador”

En una época futura en la que el rock ya ha desaparecido y las bandas ya no existen, una rockera de cuarenta años es secuestrada por un joven grupo musical y obligada (“violada”) a conectar con ellos mediante las conexiones implantadas en su cerebro para sintetizar su música y extraer sus capacidades musicales para grabar un disco.

Se advierte la utilización de nuevos términos como el juego de palabras, en ingles, entre sinner (pecador) y synthetizer (sintetizador), que creará el término synner; o con el significado literal de la palabra rock y roll –según nota de los traductores.

Cuentos de Houdini  de Rudy_Rucker

“Houdini está arruinado. El circuito de vodevil está acabado en los escenarios de esta gran ciudad. Mel Rabstein, de «Noti­cias Pathé», le llama, buscando un número nuevo. —Dos grandes por adelantado más el tres por ciento de los beneficios de la gira.     —Hecho”

Un Houdini arruinado contrata con una cadena de televisión la retransmisión en directo de tres fugas espectaculares: el lanzamiento, sin paracaídas y debidamente amordazado, desde un bombardero militar; la fuga dentro de un tronco hecho de escayola –con Houdini dentro- en un aserradero maderero mientras se sierra el tronco; la explosión junto a una bomba de gran potencia encerrado en un bloque de hielo. Houdini sale ileso.

El relato no contiene característica formal o temática destacable. Ni siquiera es un relato de ciencia ficción y mucho menos paradigma ciberpunk.

Los chicos de la calle 400 de Marc_Laidlaw

“Todo lo que nos dijeron sobre la guerra cabía en la punta del dedo de Vave, que lo ha ahuecado para poder lanzar dar­dos explosivos. El trato era que haríamos un viaje gratis a la lu­na para entrenarnos en Base Inglesa y luego nos soltarían de vuelta en la Tierra, cargados y listos para avanzar, avanzar y avanzar. Los mexisoviets estaban lanzando guerras como quien lanza huevos, una detrás de la otra, hacia el sur. El lugar esta­ba tan caliente que algunas noches podíamos ver los cielos bri­llando con un resplandor blanco que durante el día se hacía amarillo”

Un grupo de niños soldado que fueron reclutados en la última guerra mundial, sobreviven como extraños mutantes con capacidades psíquicas y armados con prótesis mortíferas implantadas en su cuerpo en una ciudad asolada donde todos los adultos han fallecido. La llegada de un grupo de máquinas gigantes asesinas que masacra a las bandas callejeras les hace a éstas unirse en un frente común para la batalla final.

Este relato destaca a nivel formal por la utilización de nuevos giros en las expresiones y por la semántica de los nombres de los personajes, formación de neologismos por yuxtaposición y recreación de un nuevo lenguaje que ayuda a la ambientación de un mundo nuevo formado por retazos y retales dejados por el desastre nuclear, la recomposición de un mundo por unos niños que apenas conocieron el anterior y construyen su presente con los restos de la desolación.

El desarrollo de la trama de este relato recuerda la odisea de la película de Wlater Hill,  The Warriors: Los amos de la noche(1979), con la recreación de estrafalarias bandas callejeras cuya estética ecléctica y recargada se corresponde con una clara ambientación ciberpunk: estrictamente urbana, postapocalítica, nuevos registros idiomáticos, pérdida y o distorsión de las referencias culturales, regresión a la tribu, cuerpos alterados con miembros mecánicos, adaptación de viejos valores a nuevas relaciones interpersonales.

A mi juicio el relato mejor logrado de la antología.

Solsticio  de James_Patrick_Kelly

“En un mundo sobreexplicado, sólo la más sutil y poderosa magia de todas sobrevivía, la magia que funciona exclusivamente en la mente. Una maldición. Una ra­za muerta y analfabeta había lanzado una maldición sobre la imaginación del mundo. Con su ruda magnificencia, Stonehenge retaba a todos a entender su significado, pues su secre­to estaba encerrado más allá de los impenetrables muros del tiempo.”

Stonehenge es un escenario musical multitudinario, una especie de “revival” de Woodstock. Las drogas son un producto de consumo generalizado diseñadas para ofrecer emociones y experiencias sintéticas al cliente. El protagonista es un prestigioso, y multimillonario,  diseñador de drogas que hiberna seis meses al año mediante criogénesis para minimizar los efectos de la edad y que tiene una hija, que es su propio clon, de la que se ha enamorado. Cuando ella conoce a un joven artista multimedia el protagonista intenta romper su relación. Una sobredosis con una droga experimental unida ala sugestiva presencia de las ruinas druídicas le hace comprender.

Dentro de la narración se van interpolando, a modo de disertación erudita, distintos hitos de la historia relacionados con Stonehenge, mostrando las distintas teorías que históricamente se han venido formulando a cerca de su origen y significación.

El relato se desarrolla en un futuro cercano, en una sociedad donde la experimentación con las drogas y la genética es una industria potente y legal.

Petra de Greg_Bear

“No creo que construir un universo nuevo requiera mejores reglas. Sin duda necesitaremos experimentar y quizás uno o más de nuestros geniales chapiteles se caerá. Pero ¡aho­ra trabajamos para nosotros mismos, para nuestra propia glo­ria, y para mayor gloria del Dios que nos creó! ¿No es así, mi feo amigo?

Tras un desastre nuclear, en los más recónditos recovecos de una lúgubre catedral gótica, en el nivel superior, habitan las esculturas formando una comunidad propia segregada de los humanos, que viven en el nivel inferior. Los amores prohibidos entre una joven humana y una gárgola es el desencadenante del motín de las gárgolas que se rebelan contra la sumisión y el confinamiento. Una pequeña gárgola de piedra logra destapar las preciosas vidrieras que han llevado siglos ocultas de la luz y con ello despierta la ilusión de un futuro mejor.

Este relato presenta unas características más afines a los relatos de fantasía que de ciencia ficción estricta.

Hasta que nos despierten voces humanas de Lewis Shiner

”Estaba paralizada dentro del círculo de luz, como cualquier animal salvaje. Su largo y liso pelo flotaba sobre sus hombros y se confundía con la oscuridad. La punta de sus desnudos pe­chos era elíptica y púrpura en el agua nocturna.Sus piernas acababan en una cola verde y escamosa.”

Un empleado de una multinacional norteamericana acude de vacaciones a una isla propiedad de su empresa. Allí se enamora de una sirena y rompe su matrimonio. Posteriormente descubre que su empresa realiza clonaciones experimentos genéticos de los que el mismo será una víctima.

Este relato sigue una estructura clásica y no destaca especialmente ni por su calidad literaria ni por su temática.Pudiera adscribirse al «biopunk» donde la transformación y manipulación del cuerpo no es tanto física como genética.

Zona libre  de  John_Shirley

“Zona Libre ofrecía entretenimiento y placer para ricos en la sección ex­clusiva, y alrededor del borde del segundo amarre, para los «tecnitas» de los equipos de perforación. Los locales de este se­gundo amarre también albergaban a unos pocos colgados semilegales y a unos pocos centenares de músicos.”

 La «Zona libre» es una instalación ubicada en alta mar que se constituye en una autentica ciudad sin ley donde se desarrollan sin fiscalización alguna las actividades más abyectas: juego, asesinatos a sueldo, conspiraciones políticas, prostitución y drogas. El protagonista es un artista musical fracasado, sin apenas caché y cuyo grupo pretende disolverse sin contar con él. En una de sus últimas actuaciones se relaciona con un grupo terrorista infiltrado y se une a ellos, como su única salida: una huida hacia delante.

El relato reune alguna de las características del ciberpunk, música underground, marginalidad urbana, clandestinidad.

Stone vive de Paul_Di_Filippo

“Biótica Citrine refino y perfeccionó el trabajo de investigadores propios y aje­nos en el campo de los chips de carbono; ensamblajes microbiológicos, unidades de reparación programadas en la sangre. El producto final, comercializado por Citrine, sólo para aque­llos que podían permitírselo, producía un rejuvenecimiento casi total, la reparación de las células o, simplemente, su re­cambio.”

Stone es un pilluelo ciego que malvive en los arrabales de una gran ciudad fuera de la influencia de las grandes multinacionales; una zona de frontera cuya preeminencia se disputan todas ellas sin conseguirlo por lo que tampoco se benefician de su manto de protección sufriendo abandono, precariedad, delincuencia y miseria. Stone es seleccionado para un trabajo muy especial, valorar, desde la óptica de un neófito, los logros alcanzados por la propietaria de la mayor corporación del planeta, una anciana de más de cien años que, sin herederos, esta ya cercana a su fin. Para ello se le implantan una prótesis en los ojos con las cuales puede acceder y asimilar a cantidades ingentes de información. Cuando el edificio sufre un atentado por parte de una corporación enemiga descubre que, en realidad es el heredero de la anciana, al que ha dejado la culminación de su obra.

Un relato entretenido e interesante que reune acertadamente los elementos ciberpunk antes mencionados creando un sociedad dual donde la apuesta por sobrevivir es a partir de el «todo o nada».

Estrella roja, órbita invernal de Bruce Sterling y William Gibson

“El coronel Korolev se dobló despacio en su arnés, soñando con el invierno y la gravedad”

En una  vieja estación orbital soviética destinada a la minería luna permanece relegado una vieja gloria de la carrera espacial, cuya prolongada estancia en un ambiente de baja gravedad le imposibilita para disfrutar de su retiro en la Tierra. La decadencia del régimen comunista, el déficit comercial y la improductividad de la misión espacial, unida a la lenta descomposición, por conflictos internos, del régimen comunista, genera rencillas y posturas enfrentadas entre los miembros de la tripulación y funcionarios del partido, provocando un motín y el abandono de la nave, todos menos el coronel. Unos “ocupas” espaciales, norteamericanos, que malviven en el espacio en unos globos solares, esferas—espejo geodésicas, su­jetas por cables eléctricos, acceden a la nave semi abandonada para instalarse a vivir.

Mozart con gafas de espejo  de Bruce_Sterling y Lewis Shiner

“El flujo temporal se había enfocado al azar en el lecho de rocas bajo Salzsburgo, formando una burbuja expandible que co­nectaba este mundo con el del tiempo de Rice.”

Relata un pasado alternativo, uno de los muchos mundos posibles a los que se puede acceder desde el futuro gracias a los viajes en el tiempo de una sociedad futura que conecta con ese mundo paralelo para proveerse, principalmente de materias primas, obras de arte y riquezas. La población nativa soporta esa explotación por interés es los pequeños aparatos electrodomésticos que se les suministra desde el futuro. En este tiempo paralelo, Mozart es un joven colaborador de los agentes comerciales, cuya música sintetizada esta siendo un éxito en las listas de los 40 principales. y urde una maniobra conspirativa para asegurarse un pase al futuro.

Destaca dentro del conjunto de relatos de esta antología por ser una ucronía de temática «steampunk», donde la revolución francesa no existió como tal y en el que la ciudad de Salszburgo, coetánea de Mozart comparte su espacio al junto a las viejas iglesias góticas con refinerías petroquímicas propias del siglo XX.

En general es una colección de relatos algo descompensada con aciertos en la elección al igual que graves errores que el tiempo ha sabido decantar. Lo más llamativo es el prólogo que sirve como estímulo para profundizar en los aspectos teóricos de esta corriente literaria.

Un saludo.

  • Título originalMirrorshades
  • TraductorAndoni Alonso | Iñaki Arzoz
  • Páginas320
  • IdiomaEspañol
  • Publicación1976 (1998)
  • EditorialSiruela
  • CategoríaCiencia Ficción
  • ISBN9788478444182

BIBLIOGRAFIA consultada (y sugerida):

Jean-Francois Lyotard_la condición postmoderna.

Guy_Debord_la civilización del espectáulo.

Jean_Baudrillard_la sociedad de consumo; cultura y simulacro.

Gilles_Lipovetsky_la era del vacío.

Gianni_Vattimo_el pensamiento debil; el fin de la modernidad.

INDICE

Nota preliminar Andoni Alonso e Iñaki Arzoz
Prólogo Bruce Sterling
El continuo de Gernsback (The Gernsback Continuum, 1981) William Gibson
Ojos de serpiente (Snake-Eyes, 1986) Tom Maddox
Rock on (Rock On, 1984) Pat Cadigan
Cuentos de Houdini (Tales of Houdini, 1983) Rudy Rucker
Los chicos de la calle 400 (400 Boys, 1983) Marc Laidlaw
Solsticio (Solstice, 1985) James Patrick Kelly
Petra (Petra, 1982) Greg BearPremio SF Chronicle 1983 de relato corto y finalista en la misma categoría del Premio Nébula y del Premio Mundial de Fantasía
Hasta que nos despierten voces humanas (Till Human Voices Wake Us, 1984) Lewis Shiner
Zona libre (Freezone, 1985) John Shirley
Stone vive (Stone Lives, 1985) Paul di Filippo
Estrella roja, órbita invernal (Red Star, Winter Orbit, 1983) Bruce Sterling y William Gibson
Mozart con gafas de espejo (Mozart in Mirrorshades, 1985) Bruce Sterling y Lewis Shiner


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«montaigne» de stefan zweig: un relato de la propia obsesión.


«Pero lo que a mí me interesa e importa de Montaigne hoy es cómo en una época parecida a la nuestra, supo ser interiormente libre, y cómo, al leerlo, nos sentimos fortalecidos por su pensamiento» S.Z

Stefan Zweig (Viena, 1881 – Petrópolis, Brasil, 1942) fue un escritor enormemente popular, tanto en su faceta de ensayista y biógrafo como en la de novelista. Su capacidad narrativa, la pericia y la delicadeza en la descripción de los sentimientos y la elegancia de su estilo lo convierten en un narrador fascinante, capaz de seducirnos desde las primeras líneas. En Acantilado han aparecido ya La lucha contra el demonio (Hölderlin, Kleist, Nietzsche), Castellio contra Calvino (Conciencia contra violencia), Momentos estelares de la humanidad (Catorce miniaturas históricas), El mundo de ayer (Memorias de un europeo), La embriaguez de la metamorfosis, Veinticuatro horas en la vida de una mujer, Novela de ajedrez, Carta de una desconocida, Los ojos del hermano eterno, Ardiente secreto, El amor de Erika Ewald, Tres maestros (Balzak, Dickens, Dostoievski), Noche fantástica, La mujer y el paisaje,Correspondencia, Montaigne, La curación por el espíritu, El candelabro enterrado, La impaciencia del corazón, El legado de Europa, Amok, Viaje al pasado, Mendel el de los libros, ¿Fue él?, Los milagros de la vida, Las hermanas y las biografías Fouché y María Antonieta. (de su biografía en Acantilado Editorial)

En 1942, Stefan Zweig se suicidó junto con su esposa Lotte deprimido y desencantado respeto de su propio futuro y el de su país, envuelto en una guerra atroz e interminable. Sin fuerzas para afrontar la realidad, como el mismo dejó escrito, y sin material bibliográfico para continuar su trabajo, tomó la decisión de finalizar su vida y abandonó inacabado su último proyecto, la biografía sobre el pensador francés Michel Eyquem de Montaigne.

Pese a ser un trabajo inconcluso, no deja de ser un proyecto biográfico de un autor que demostró una valía inigualable en perfilar con lucidez los contornos sociológicos de los personajes objeto de su estudio y alcanzar la hondura psicológica de sus caracteres; todo ello unido a una prosa clara y fácil, como extraordinario novelista que era.

Este libro que nos ha quedado, de apenas cien páginas de extensión, carece de las características propias de una biografía pues apenas aporta datos, fechas y acontecimientos de la vida del biografiado, salvo hitos relevantes de su historia personal. Sin embargo es una estupenda invitación y prólogo para introducirse en la obra del autor de «los ensayos».

Zweig traza una línea que define la trayectoria humana (personal e intelectual) de M. de Montaigne y no la abandona en todo el libro: la firme e inquebrantable voluntad de preservar la libertad individual y la independencia de pensamiento y acción frente a imposiciones coactivas, convenciones sociales y corsés intelectuales.

Destaca Zweig su innovadora educación, mediante la inmersión lingüística en el latín desde sus primeros años y el acceso que tuvo a las fuentes clásicas; la casi total ausencia de disciplina académica y el fortalecimiento de un espíritu crítico y analítico sobre la generalidad de la técnica pedagógica basada en la memoria y la asimilación por repetición. Igualmente resalta cómo la elevada posición económica  de su progenitor le permitió no someterse a más volubilidad que la suya propia y no a las arbitrariedades de los demás.

Así M. de Montaigne, cuando heredó la fortuna y propiedades paternas, concibió su cuidado y administración como una losa que le mantenía sepultado en la maraña incontable de las preocupaciones domésticas y cotidianas, entre las que incluyó al matrimonio. Por ello decidió iniciar una especie de destierro voluntario en la torre de la ciudadela de su propiedad y, rodeado de libros que ojeaba a su antojo, se puso a plasmar por escrito, sin sujeción a ninguna otra regla de estilo ni contenido más que a su propia voluntad, sus pensamientos y reflexiones cuyo eje era el propio autor.

Quizás de manera inconsciente Stefan Zweig se identifica con Montaigne al que nos presenta como una llama solitaria rodeada de la inmensidad de la noche de una era oscura y vuelca su propia obsesión sobre el incierto destino de esa época cuyo fin decidió no contemplar (adelantándose al amanecer, como dejo escrito a sus amigos). Zweig admira el coraje de Montaigne de «conservar impoluta la independencia intelectual y moral en medio de una castastrofe de masas» y a lo largo de todo el libro recalca esta cuestión.

Este es un ensayo muy recomendable como introducción a la obra de Montaigne, un aperitivo sutil, para un gran banquete intelectual.

Un saludo.

Portada Montaigne

  • Colección: El Acantilado, nº160
  • Temática: Historia, política y sociedad, Filosofía, Biogr
  • Traducción: J. Fontcuberta
  • Edición: Knut Beck
  • Prefacio: J. Bayod Brau
  • Notas: J. Bayod Brau
  • ISBN: 978-84-96834-29-3
  • Nº de edición: 5ª
  • Encuadernación: Rústica Cosida
  • Formato: 13 x 21 cm
  • Páginas: 112


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«dioses, tumbas y sabios» de C.W.Ceram, una crónica periodística sobre la aventura en busca del saber antiguo


«Incluso los problemas científicos más complicados pueden presentarse de un modo más sencillo y comprensible si se los describe como procesos de trabajo, es decir, conduciendo al lector exactamente por el mismo camino que recorrió el sabio investigados desde el momento en que tuvo la primera inspiración hasta que alcanzó el resultado apetecido» C.W.C


Nuestra época disfruta de manera inconsciente la facilidad de acceso a la infomación y al conocimiento que la tecnología nos ofrece. Es más complicado acceder a las fuentes primarias del conocimiento como, por ejemplo, los yacimientos arqueológicos y sin embargo nuestro desarrollo tecnológico permite a nuestros científicos y estudiosos emprender una labor de investigación con mayor facilidad y eficacia que antaño y presentarnos a tiempo real el avance en su campo de conocimiento: National Geographic es un escaparate mundial para la difusión y promoción (también para la captación de fondos e ingresos) de ciencias como la biología, la arqueología, etc.

Por el contrario, en los inicios de dichas ciencias, los estudiosos e investigadores no solamente eran científicos sino audaces aventureros que osaron adentrarse en las selvas y territorios que no habían sido hollados en siglos y redescubrir paisajes y civilizaciones tras los pasos de aquellos otros hombres que, antes que ellos, las elevaron y, también, las derrumbaron o abandonaron.

C. W. Ceram, periodista alemán nacido en Berlín en 1915 y fallecido en Hamburgo en 1972, publicó en 1949 el libro hoy objeto de reseña con la intención de crear una obra eminentemente divulgativa, no científica, sobre la historia de la Arqueología, plasmando los hechos con rigor y exactitud en formato novelado pero con pretensiones de utilidad; así lo explica en el prólogo de su libro y así justifica además que el volumen cuente con un apéndice  bibliográfico, cartográfico, cronológico y un índice de materias.

La obra se articula en cuatro apartados principales o «libros», como los denomina el autor, cada uno dedicado a una civilización antigua: I libro de las estatuas, sobre la civilización CRETO-MICENICA Cronología (fuente, Wikipedia); II libro de las pirámides, sobre la civilización del ANTIGUO EGIPTOAntiguo Egipto; III Libro de las Torres, sobre la CIVILIZACION MESOPOTÁMICA, Mesopotamia; y IV Libro de las escaleras, sobre la cultura de la AMERICA PRECOLOMBINA Mexica y Maya. Culmina con un último capítulo sobre los libros de la historia de la arqueología que todavía no pueden escribirse, una especie de post-escriptum en el que se excusa por reducir su obra a las cuatro grandes civilizaciones de la antigüedad y dejar anotada la importancia de otros investigadores cuyo objeto de estudio son otras grandes culturas desaparecidas como la cultura china, india, japonesa, africana y otras.

Cumpliendo su voluntad divulgativa este libro es muy ameno, fácil de leer y un instrumento ideal para todo aquel que quiera introducirse en el mundo de la historia de la arqueología con los ojos de un profano, además de contar con un os interesantes apéndices para profundizar más en el tema. No en vano se ha convertido en un best seller, un clásico que todo el mundo conoce y recomienda.

Pese al tiempo transcurrido desde su primera publicación, es un libro que no ha perdido interés ni actualidad por cuanto que su contenido es intemporal y el relato de las peripecias y afanes de SchliemannChampollion, o Howard Carter forman parte ya del mito y la aventura del conocimiento.

Un saludo

  • Nº de páginas: 480 págs.
  • Traducción:Manuel Tamayo
  • Editoral: DESTINO
  • Edicion Original: Noviembre 1949
  • ISBN: 9788423340798


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«payasos y monstruos» de Albert Sanchez Piñol: los monstruos del poder absoluto en Africa.


«Lider del Acero», «Milagro Único», «Señor de Todas las Bestias de la Tierra y Peces del Mar», A.S.P.

Albert Sánchez Piñol (Barcelona, 1965) escritor y antropólogo español. Ha escrito una novela ganadora del Premio Ojo Crítico 2003,  La piel fría (inicialmente publicada en catalán), así como otra extraordinaria novela ambientada en Africa en los albores de la primera Guerra mundial titulada Pandora en el Congo (2005), a mitad de camino entre la novela de aventuras y la temática fantástica al estilo Lovecraft (dicho sea sin pretender que este atroz reduccionismo, curiosamente certero pero también breve y apresurado,  empañe  su estupenda calidad literaria).

La obra «Payasos y monstruos» pone de manifiesto dos de las facetas de la vida personal de escritor, por un lado su contacto y conocimiento de Africa (es, según su biografía, miembro del Centro de Estudios Africanos)  y por otro sus estudios de antropología. Tanto una como otra se encuentran presentes en el relato biográfico de los distintos dictadores Africanos que recoge el libro.

Sin consistir en un sesudo ensayo socio-político sobre las causas y consecuencias de su ascenso al poder o su significación política y económica en su particularismo concreto o a nivel «global», sí es un libro interesante para documentarse de una manera superficial pero suficiente sobre el elenco de dictadorzuelos y personajillos que convirtieron sus respectivos paises en una dictadura bananera más propio de una película de cine mudo. De ahí el título tan descriptivo de Payasos (absurdos e hilarantes) y Monstruos (genocidas, torturadores, y psicopatas). Sin embargo, debido a las graves consecuencias que su actuación trajo para sus propios subditos las sonrisas dejan paso a la indignación y el bochorno.

Muchas veces nos preguntamos cómo es posible el atraso del continente africano, aquí podemos encontrar una respuesta y la semilla de la responsabilidad de nuestros propios estados occidentales.

El libro se compone de los siguientes capítulos:

Uganda: Amin Dada, El espectáculo del poder o el poder del espectáculo;  República Centroafricana: Bokassa. El emperador del mal gusto;  Malaui: El Dr. Banda y Mr Hyde;  República Democrática del Congo: Mobutu Sese Seko y la cueva de los ladrones;  Guinea:  Sekou Touré. El gran fabulador; Guinea Ecuatorial: Macías Nguema. El hombre de los mil nombres;Guinea Ecuatorial: Obiang Nguema. Dictador de última generación.

Es un libro de fácil lectura, y muy interesante, ideal como aperitivo para introducirse aún más en la historia de los regímenes africanos.

Un saludo

Portada de Payasos y monstruos
Páginas: 200

Publicación: 01/06/2006

Temática: Historia y biografías

ISBN: 9788403097094

 Editorial: Aguilar


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«nuestra especie» de Marvin Harris: por qué somos como somos


«En un principio era el pie. Hace cuatro millones de años, antes de adquirir el uso de la palabra o la razón, nuestros antepasados ya caminaban erguidos sobre dos pies» M.H

Marvin Harris 1927-2001; Antropólogo norteamericano, nacido en Nueva York en 1927, y fallecido en Florida en 2001. Fue un autor prolífico que aunó una labor teórica y científica con una abundante obra divulgativa y que contribuyó a acercar a un público profano una materia tan técnica como la antropología (díganselo a Levi-Strauss).

Dentro de esa bibliografía divulgativa destacan auténticos “best sellers” de gran interés: 1974 Vacas, cerdos, guerras y brujas. Los enigmas de las culturas. Edición española en Alianza; 1977 Caníbales y reyes: Los orígenes de las culturas, ediciones españolas en Argós Vergara y Alianza; 1985 Bueno para comer, edición española en Alianza en 1989; 1985 Jefes, cabecillas, abusones, edición española en Alianza, 1993;1987 Muerte, sexo y fertilidad, edición española en Alianza, 1991;1990 Nuestra especie, edición española en Alianza 1994.

En este contexto el libro reseñado, “Nuestra Especie” en un compendio, excepcional y minucioso, que realiza Marvin Harris sobre el análisis y disección de los comportamientos, actitudes, creencias y logros de la especie humana a lo largo de la evolución natural desde el australopitecus hasta el hombre moderno, desde una perspectiva evolutiva y también desde un punto de vista social o cultural.

Presentado en capítulos cortos, su contenido es interesante sobre todo para las personas ajenas al mundo de la antropología pero interesados en las ciencias sociales como la historia, sociología, etnología, psicología, todas ellas emparentadas e interrelacionadas.

En cada capítulo nos relata cómo el ser humano tal y como lo conocemos ha ido evolucionando culturalmente instigado por su voluntad de satisfacción de sus instintos básicos y cómo a partir de  un momento dado en que la selección natural determinó la configuración de nuestra especie con el homo sapiens (no distinto al hombre moderno en cuanto a sus características físicas) ha sido la selección cultural la que ha ido proporcionándonos las herramientas y comportamientos  que conforman nuestra cultura actual.

Algunas de las entradas más interesantes son:

HERRAMIENTAS, ¿PARA QUÉ? – EL CEREBRO EMPIEZA A PENSAR – EL DESPEGUE LINGÜÍSTICO – ¿POR QUÉ COMEMOS DE MÁS? – .EL PLACER SEXUAL- ¿CUÁNTOS HIJOS? – EL PORQUÉ DE LA HOMOSEXUALIDAD.-  CUANDO LAS MUJERES MANDAN EN CASA – ¿POR QUÉ ANSIAMOS PRESTIGIO? – DEL GRAN HOMBRE AL JEFE.-SACRIFICIOS HUMANOS.- LOS DIOSES QUE NO COMÍAN SERES HUMANOS. – LOS DIOSES QUE COMÍAN SERES HUMANOS. – ¿SE REPITIÓ LA HISTORIA? -¿SOBREVIVIRÁ NUESTRA ESPECIE?

Marvin Harris fue el principal defensor del “Materialismo Cultural”, que propugna la prevalencia de las condiciones materiales como causa de las diferencias culturales. Según ésta teoría, cada cultura se compone de infraestructura (prácticas de supervivencia y reproducción), estructura (elementos organizativos como la familia, la organización económica o política, la educación) y superestructura (elementos  religiosos o ideológicos) siendo la primera de ellas la que atiende a las necesidades básicas de alimentación y reproducción. En caso de conflicto entre ellas, siempre prevalecerá cualquier innovación o diferencia cultural tendente a satisfacer esas necesidades básicas.

Posiblemente Marvin Harris sea, junto con Nigel Barley, el antropólogo más famoso y conocido para un público no especializado.

Un saludo

  • Alianza Editorial
  • Colección El libro de bolsillo
  • Traducción, Gonzalo Gil, Joaquin Calvo e Isabel Helmann
  • 536 págs.
  • I.S.B.N.: 978-84-206-3952-9


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«corazón de ulises» de Javier Reverte: no solo un viaje, no solo un libro sobre viajes


«En todo largo periplo hay un momento en que percibes que el viaje ha comenzado de veras, y no suele suceder al principio, sino cuando sientes que tu alma ha escapado definitivamente a la rutina» J.R.

¿Cuántas «Grecias» existen? La Grecia contemporánea, con sus ruinas (las de mármol viejo y las cavernosas entelequias financieras), con sus infinitas islas apretadas en un mar de límpidas y transparentes aguas; la de la costa escarpada poblada de hileras de casitas cual hormigas blancas. Y también la Grecia clásica, mítica referencia cuyo recuerdo pervive en los cantos de poetas e historiadores y que vio nacer las primeras artes, las primeras ciencias, el germen de nuestra civilización occidental.

Javier Reverte con su libro el «corazón de Ulises» nos invita a un viaje por ambas realidades y, gracias a su prosa amable y evocadora, nos ofrece un recorrido por otra Grecia distinta,  la Grecia imaginada, la que imaginamos sin haberla conocido y la que muchos otros imaginaron e intentaron recrear.

Siguiendo la ruta señalada por Homero en la «Odisea» recorremos la geografía física y humana de la Grecia antigua cuya correspondencia moderna encontramos dispersa en nuestro mediterráneo oriental, Creta, Chipre, Anatolia. Con el estilo que le caracteriza, cada paisaje, cada lugar nos abre una ventana a la historia y Javier Reverte nos revela la anécdota y el acontecimiento. Es un maravilloso libro de viajes pero no solamente un libro de viajes, es también un viaje erudito por el que descubrimos las huellas dejadas por Byron, Henry Miller, Lawrence Durrell y Ulises antes que ellos.

El «corazón de Ulises» de Javier Reverte me aficionó a la literatura viajera y me enseñó también otra manera de viajar, me incitó a conocer y a aprender durante el camino. Gracias a Javier Reverte me animé a conocer a Kapuscinski, Chatwin, Forbath (http://wp.me/p2Dojb-2W), Richard Burton que convirtieron mis viajes de salón de lo más gratificantes. Este es un libro muy recomendable,  muy ameno, fácil de leer y elemento imprescindible en nuestro equipaje griego.

Javier Martinez Reverte es un periodista y escritor español, madrileño, para más señas, nacido en 1944. Su obra es prolífica y diversa, aunque predominan los libros sobre temática viajera, aunque no solo.

Ha escrito, entre otros: El río de la desolación. Un viaje por el Amazonas. (2004, Amazonas . Corazón de Ulises. (2006, GreciaTurquía y Egipto). En mares salvajes. Un viaje al Ártico. (2011). Memorias y biografías: Dios, el diablo y la aventura. (2001, Pedro Páez).

Quiero destacar principalmente su Trilogía de África, compuesta por  El sueño de África: En busca de los mitos blancos del continente negro. (1998); Vagabundo en África. (2000); Los caminos perdidos de África. (2002). El sueño de África, es otro gran libro sobre un recorrido legendario, el del Río Congo (y Tanzania, Kenia, Uganda, etc) que cuenta con un  guía excepcional, Josep Conrad, también convertido en mito y leyenda del horror africano: la aspereza de un paisaje profundo un fecundo, que enloquece y animaliza al hombre civilizado. También nos relata Javier Reverte su periplo sobre los pasos de otros hombres (que el camino se hace al andar, y andar hollando surcos ya pisados)  amenizando el viaje con su conversación culta y erudita sobre la historia y el mito. Este es otro de mis libros favoritos de viajes que no puedo dejar de recomendar.

  • EDITORIAL: Editorial Aguilar
  • LUGAR Y AÑO DE EDICIÓN: Madrid, 1999. 1ª Edición
  • Nº DE PÁGINAS: 522
  • GÉNERO: narrativa de viajes.
  • ISBN: 9788401379581


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«el día que españa derrotó a inglaterra» de Pablo Victoria: la historia oculta de nuestra Historia oculta.


«AND AT CARTHAGENA CONQUERED AS FAR NAVAL FORCE COULD CARRY VICTORY» (y en Cartagena conquistó tanto como una fuerza naval podría llevar a la victoria)  Epitafio del Almirante Vernon, Westminster Abbey (yo estuve allí).

El libro reseñado relata en un estilo novelado la defensa de la Plaza de Cartagena de Indias realizada en 1741 por el Almirante Blas de Lezo frente a la flota inglesa del Rey Jorge II comandada por el Almirante Vernon.

El libro reseñado es muy interesante por cuanto pone en descubierto unos hechos de nuestra historia sino desconocidos ciertamente arrinconados y soslayados, creo yo, por prejuicios ideológicos de aquellos que se avergüenzan de ensalzar un pasado histórico ligado al Imperio y al colonialismo.

Con ello solamente se abandona a la manipulación y a la apropiación por parte de grupos radicales una historia común que en modo alguno ansiamos repetir ni tampoco justificaríamos hoy en día. El pasado nos pertenece y nosotros pertenecemos a él y es justo reconocer los logros de nuestros antepasados que cumplieron con su deber y defendieron su honor y sus ideales (contemporáneos de un tiempo y una época histórica concreta) sin que ello signifique que debamos retar a un duelo a cualquiera que opine distinto a nosotros.

UN POCO DE HISTORIA:

Los antecedentes de la batalla de Cartagena de Indias los encontramos en el incidente de la guerra de la oreja de Jenkins” en 1739 por el cual Inglaterra declara la guerra a España y decide tomar y someter Cartagena de Indias a fin de estrangular el envío regular de todas las riquezas de las colonias americanas que confluyen a dicho puerto y del que parten hacia la metrópoli.

La ambición comercial de Inglaterra, que reclamaba nuevos mercados para un imperio en auge frente a la oposición de un imperio español que, si no se encontraba todavía en decadencia había iniciado un lento declive, fue el caldo de cultivo para destapar un enfrentamiento latente y concederle a los ingleses una excusa para acometer la empresa de la conquista del oro y la plata coloniales.

La anécdota, plena de altanería española, ocurre cuando un capitán español, llamado Juan León Fandiño, en la costa de Florida apresa a un barco inglés que realizaba comercio no permitido, comandado por el capitán Robert Jenkins al cual le hizo cortar una oreja y le devolvió a su rey con un mensaje muy claro: «Ve y dile a tu Rey que lo mismo le haré si a lo mismo se atreve».

El gobierno inglés armó una flota compuesta de 186 barcos y 23.000 hombres al mando del almirante Sir Edward Vernon, la cual superaba, incluso, los 120 barcos de la Armada Invencible de Felipe II, con lo que nos da una idea del poderío militar exhibido y, visto el resultado final, la importancia épica de la victoria española.

Dicha flota se presentó en la bahía de Cartagena que contaba con 3000 defensores, no todos ellos tropa regular, y 6 navíos, al mando del  Virrey Eslava y el Almirante Blas de Lezo , viejo marino apodado el «medio hombre» por ser tuerto, cojo y manco, producto de anteriores batallas navales.

La ignominia inglesa fue más patente aún por haber mandado el Almirante Vernon acuñar en Inglaterra medallas conmemorativas de la victoria, en las que aparecía Blas de Lezo rindiéndole la plaza, anticipándose al desarrollo de la batalla y plenamente convencido de la supremacía británica que, al menos teóricamente, se correspondía con la desproporción entre los medios del atacante y los escasos pertrechos de los defensores.

Con una habilidad e inteligencia inusuales, aprovechando al máximo la orografía del terreno y la configuración de la bahía de Cartagena, así como sus formidables fortificaciones, Blas de Lezo optimizó todos sus recursos y humilló grandemente al soberbio almirante inglés. A modo de ejemplo: la genialidad de Blás de Lezo que, una vez que los ingleses midieron la altura de las fortificaciones para construir las escalas con las que asaltarlas, salieron en la oscuridad de la noche los hombres y mujeres de Cartagena y excavaron un profundo foso al pie de las mismas haciendo inadecuadas las escaleras inglesas, que sorpresivamente se les habían quedado cortas.

Con su estilo incomparable Inglaterra convirtió a pesar de todo la derrota en victoria frente a la opinión pública de la época. Al igual que se hiciera Isabel I con el desastre de la contra_armada de Drake, se prohibió toda referencia pública a la batalla, se borró de las crónicas la mancha provocada a la orgullosa flota inglesa, a lo que contribuyó la poca defensa y promoción que hizo España de su victoria.

Al almirante Vernon ni mucho menos se le destituyó y en el ambiguo epitafio de su tumba, un turista incauto bien pudiera pensar que, efectivamente, en Cartagena alcanzó la victoria que su fuerza naval le pudo proporcionar, pese a que no pudo.

LAS FORTIFICACIONES DE CARTAGENA DE INDIAS: ESTUDIO DETALLADO, Fuente: Biblioteca Virtual Biblioteca Luis Angel Arango

Con estos dos enlaces podemos estudiar con detalle las defensas y fortificaciones de Cartagena de Indias, el marco donde se desarrolló la famosa batalla.

LA PLAZA:  http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/historia/fortificaciones/fortif3.htm

LA BAHIAS: http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/historia/fortificaciones/fortif2.htm

Según información que facilita en su propio blog, Pablo Victoria es doctor en economía y doctor en filosofía. Ha sido congresista y Senador de la República de Colombia, profesor universitario, escritor, historiador y columnista de diversas publicaciones. Ha escrito una serie de libros de temática histórica y política: El día que Cartagena derrotó a Inglaterra 2012Al oído del rey 2005;  El día que España derrotó a Inglaterra 2005; España contraataca 2005 (este último, también muy recomendable,  relata la intervención del general Bernardo de Gálvez en la Guerra de Independencia norteamericana, que ocupa los puestos ingleses en el río Mississippi y reconquista de La Florida proporcionando a los rebeldes americanos una ayuda tan importante como desconocida, ninguneada respecto de la famosa presencia de Lafayette.

La figura pública de Pablo Victoria resulta un tanto controvertida por la atribución de afinidades políticas ultraderechistas, sin embargo el presente trabajo se  ciñe exclusivamente a la valoración de la obra reseñada en sí misma considerada, sin connotaciones de ninguna especie. Cuando leí el libro por primera vez me pareció un magnífico trabajo y desconocía todo sobre su autor. El simple hecho de justificar con estas líneas la pertinencia de la reseña me incomoda, máxime cuando entiendo que sería totalmente superflua si el autor fuera un marxista reconocido como por ejemplo García Márquez o Mario Benedetti (a cuyo estudio pretendo dedicar mi tiempo en futuros trabajos) cuya calidad literaria es indiscutible (e insuperable) siendo absurdo que el vergonzoso velo de la corrección política empañe el brillo que reverbera en sus obras por sí solas.

  • 17.0×24.0cm.
  • Nº de páginas: 228 págs.
  • Editorial: ALTERA 2005
  • Lengua: ESPAÑOL
  • Encuadernación: Tapa blanda
  • ISBN: 9788489779686
  • Año edicón: 2005
  • Plaza de edición: BARCELONA


«el rio congo» de Peter Forbath: una merienda de negros, la hipocresía homicida y explotadora


Desde la bruma de la leyenda hasta el horror y la infamia del corazón de las tinieblas.

El subtitulo del libro reseñado resume en una frase las pretensiones de ése trabajo: relatar a modo de ensayo histórico el descubrimiento, exploración y explotación del río más dramático de la tierra.

Un buen título, un buen titular; sin embargo lo esencial del libro y su objetivo primordial, según mi opinión, es la crónica del perturbador choque a lo largo del siglo XIX entre la civilización occidental (europea) y la cultura africana en la cuenca del río Congo, y la dramática y nefasta influencia de esa civilización presuntamente bienintencionada, iluminadora y civilizadora  que supuso el exterminio, la esclavitud, la esquilmación y la degradación de una población y una cultura bajo la bandera hipócrita del filantropismo y el progreso humano.

Peter Forbath,  (1931′-1998) periodista norteamericano, ocasional historiador y novelista (qué diría él). Fue corresponsal de la revista Time y trabajó destinado en Africa (fue expulsado de Uganda por informar sobre el aprovisionamiento de armas a la guerrilla congoleña) Europa (en la crisis checoslovaca) y Oriente (intervino como informador en la Guerra de los Seis Dias) . Autor de la novela «Congo Luso».

Este ensayo histórico nos ofrece con bastante amenidad y desenvoltura periodística la crónica histórica y geográfica del Rio Congo. Está estructurado en cuatro partes:

LOS VIAJES, relato de las leyendas sobre la dinastía del Preste Juan en la ignota y mítica región de Etiopía que animaron a los viajeros portugueses.

EL DESCUBRIMIENTO, los primeros contactos de los portugueses con los nativos africanos y la cristianización del Reino del Kongo, cuyo Rey, Don Alfonso fue finalmente traicionado por el Rey Don Manuel de Portugal, abandonado su reino a la voracidad de los esclavistas y a las luchas internas entre los defensores del credo cristiano y los paganos.

LAS EXPLORACIONES, donde recoge las expediciones geográficas de los grandes exploradores del Africa y la gestas impresionante en favor del conocimiento humano de todos aquellos entusiastas y temerarios que fueron dando a conocer el dibujo del mapa mudo del  Africa Central.

LA EXPLOTACION, donde se hace notar la profesión de periodista de Forbath en denuncia de la mayor infamia cometida en nombre de la ilustración y la filantropía durante el Estado Libre del Congo.

Culmina el libro con un EPILOGO del profesor, experto en Africa, Jose Luis Cortés Lopez como addenda referida al periodo 1965-2002 completando la última crónica del desastre humano del Congo de Mobutu.

El libro no es un compendio de la historia de esa región africana sino solamente un breve apunte de la cronología de su descubrimiento por parte de los exploradores de la Edad Contemporanea; tampoco es un tratado etnográfico sobre las costumbres y tradiciones de aquella población sino únicamente respecto de su cristianización, siempre desde una visión eurocéntrica.

Lo que verdaderamente es este libro es una denuncia de la sistemática explotación de la región del Congo por parte de los países colonizadores europeos y, principalmente, el detalle de la labor genocida, esclavista y criminal del Rey Leopoldo II de Belgica, que se instituyó señor y soberano del Estado Libre del Congo que nunca fue Estado, ni libre ni pertenenciente a la población congoleña . El Rey Leopoldo se emparenta con la familia de los dictadores-exterminadores a la que pertenencen Mao, Hitler, Stalin y  Pol Pot, con la particularidad de que, mientras en el país europeo ejercía como un jefe de estado democrático sujeto al imperio de la ley, en su parcela africana ejerció como déspota absoluto sin límite o control alguno salvo el de su desaforada ambición.

Ya he dicho que es un libro muy  interesante, ameno y facil de leer, con un estilo claro y con la adecuada proporción entre las fuentes y datos hitóricos que proporciona y su formato divulgativo. Si acaso, es palpable el error cometido al prescindir totalmente de un apoyo cartográfico con el que seguir los progresos de las distintas expediciones y ubicar en un mapa las distintas regiones y localidades mencionadas.

Dejo apuntadas en esta reseña cuatro notas sobre el descubrimiento y exploración del recorrido del rio Congo, sobre su descripción geográfica y una pequeña relación bibliográfica donde consultar con mayor extensión este tema tan apasionante y desconocido.

BREVE NOTICIA DE SU DESCUBRIMIENTO Y EXPLORACIÓN

En 1485 el portugués Diogo Cão descubrió la desembocadura del río Congo, al que llamó río Zaire según la denominación que los propios nativos le atribuían. Debido a la dificultad de remontar su curso y la oposición de ciertas tribus nativas, una expedición promovida por el Almirantazgo británico en 1816 y comandada por el capitán J. Tuckey fracasó estrepitosamente, lo que retrajo futuros intentos. Otro inglés, Camerón, lo intentó en 1873 adentrándose aún más en el territorio. El famoso Henry Morton Stanley a cargo de una expedición patrocinada  por los periódicos N.Y. Herald y Daily Telegraph, que pretendía atravesar Africa Central de costa a Costa, llegó a salvar el escollo de las cataratas Livingstone hasta el lago denominado Stanley Pool (lago Malebo) y pudo demostrar en 1877 que a partir de dicha zona el río era navegable. El italiano Brazza, fundador de Brazzaville (actual República del Congo) como agente al servicio de Francia, alcanzó en 1875 el Rio Congo desde Gabón, colonia francesa, animando a su gobierno a colonizar la región y despertando la disputa internacional sobre la zona, lo que daría lugar al reparto entre las potencias de la influencia sobre la desembocadura del Rio Congo.

INFORMACIÓN GEOGRÁFICA más detallada en Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/R%C3%ADo_Congo

El río Congo (también conocido como Zaire) es el mayor río de África central, el segundo río más largo de África después del río Nilo, el segundo río más caudaloso después del río Amazonas. Su curso cruza dos veces el Ecuador, motivo por el cual despistó por mucho tiempo a los osados aventureros y exploradores que le intentaron recorrer desde los distintos afluentes de lo que era un mismo río.

SUCINTA BIBLIOGRAFÍA

Aparte de la referencia, ineludible, a la novela «El corazón de las tinieblas» de Joseph Conrad o «El sueño del celta» de Mario Vargas Llosa (algo decepcionante y, desde luego, no de lo del escritor español – léase peruano por lugar de origen-  aunque sí tuvo la fortuna de ser la primera después de la concesión del premio Nobel), así como la propia novela de Forbath «El Congo Luso», dejo aquí algunas referencias algo más acordes con el género del libro objeto de reseña. Un saludo

El río Congo

  • Autor: PETER FORBATH
  • ISBN/ASIN: 9788475065083
  • Editorial: TURNER
  • Fecha de publicación: 1977
  • Fecha de edición: 2002
  • Traducción: Esther Muñiz 
  • Epilogo: Jose Luis Cortes Lopez
  • Número de páginas: 488


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«tantos tontos tópicos» de Aurelio Arteta o los andamios de la estupidez


«–No más refranes, Sancho, pues cualquiera de los que has dicho basta para dar a entender tu pensamiento; y muchas veces te he aconsejado que no seas tan pródigo en refranes y que te vayas a la mano en decirlos; pero paréceme que es predicar en desierto, y «castígame mi madre, y yo trómpogelas». Miguel de Cervantes

Aurelio Arteta como filósofo y catedrático de Filosofía Moral y Política de la U.P.V. ha elaborado una fecunda obra académica que me resulta excesivamente difícil de digerir (sobre todo cuando se come sin ganas), y es que Marx y su problemática ontológica me resulta complicado de entender y se aleja mucho de mis inquietudes intelectuales y de mis gustos literarios.

Sin embargo, ha publicado el libro objeto de reseña, «tantos tontos tópicos», el cual atrajo inmediatamente mi atención, no en vano una de mis frases favoritas es «hay más tontos que ventanas». Paseamos por la vida sin percatarnos de la realidad que nos circunda; el autor nos pone de manifiesto en su prólogo cómo la pereza intelectual y la necesidad de socializarnos echa mano de los tópicos y las frases hechas para discurrir (dicho con doble significado) por una vía acomodaticia y fácil, sin crítica alguna, sin análisis, sin objetividad.

Aurelio Arteta desmonta nuestra sociedad actual, la desmenuza y abate con su prosa filosa los árboles que no nos dejan ver el bosque. Estructurado en dos partes, el libro acomete el análisis de nuestra moral individual, (esa de andar por casa y que, la mayoría de las veces, allí debería quedarse) así como nuestra moral política. La ética y la política, bien diferenciadas.

La enumeración de los distintos tópicos es bastante exhaustiva y, verdaderamente, son unos tópicos típicos. El filósofo los disecciona y pone de manifiesto sus endebles estructuras su carencia de rigor, de sentido y significado.

El pensamiento precede al acto y muchas veces la palabra conforma y condiciona el pensamiento, pues no dejamos de «pensar» palabras y esas palabras construyen frases que, encadenadas, ensambladas, forman los raíles por donde discurre nuestra lógica.

Si acomodamos nuestro pensamiento a estructuras ya preconcebidas, sin un mínimo pensamiento crítico, nuestras capacidades dejan de ser nuestras para convertirse en vehículo de ideas y creencias ajenas que nos limitamos a transmitir sin rigor crítico alguno, perpetuando indolentemente el prejuicio y el tópico (y el que esté libre de pecado que tire la primera piedra).

Lo cierto es que he disfrutado mucho más con la primera parte del libro quizás porque al ser más general, es más accesible y más reconocible en nuestra vida cotidiana. La segunda parte, por el contrario, es más específica, más referida a la política y, por ello, parece más el diagnóstico de un mal ajeno.

Es este un libro muy recomendable que puede incomodarnos y hacernos sonrojar. Y si no, ¿podemos decir que nunca hemos abusado de estos lugares comunes?:

“Eres un moralista. Déjate de filosofías. Sé tú mismo. Es una persona muy normal. Mi cuerpo es mío (y hago con él lo que quiero). No siento miedo, sino sólo respeto. Eso es muy relativo. Nadie es más que nadie. Respeto sus ideas, pero no las comparto. Seamos tolerantes. No debemos juzgar a nadie. Todos tenemos alguna parte de verdad. Todos harían lo mismo.

 “Una cosa es la teoría y otra la práctica. La política es asunto de los políticos. Los sentimientos políticos son intocables. Conservemos las tradiciones. Desapruebo lo que dices, pero defiendo tu derecho a decirlo. El problema es muy complejo. Estoy en mi perfecto derecho. Todas las opiniones son respetables. Somos mayoría, y punto.

¿A que sí?

Un saludo.

SINOPSIS EDITORIAL: La filosofía práctica no está hecha para predicar en el vacío, sino para guiar nuestra conducta privada y pública. Como una vía de acercar esa reflexión a la gente, Aurelio Arteta nos propone reunir estos tópicos tan familiares a fin de escudriñar sus flacos fundamentos y efectos perversos. Ellos delatan las creencias dominantes, los grandes prejuicios colectivos. Tantos tontos tópicos recoge desde las excusas más socorridas de la irresponsabilidad y la pereza hasta la retórica ordinaria sobre la violencia o la democracia.Son estos comodines del lenguaje ordinario los que nos aportan la seguridad de que no estamos solos

AURELIO ARTETA AISA: Catedrático  Universitario, filósofo y escritor nacido en Sangüesa, Navarra,  el año 1945. Es Doctor en Filosofía y licenciado en Sociología. ha ejercido como Catedrático de Filosofía Moral y Política en la Universidad del País Vasco hasta 2015. 

Editorial Planeta
Colección Ariel
240 páginas
ISBN: 978-84-344-7064-4